La primera y más importante universidad madrileña en número de alumnos, que se financia en un 80% con dinero procedente del Ejecutivo regional, arrastra una importante deuda con la Administración que dirige Esperanza
Aguirre, según su rector. A esto hay que unir el pago de los servicios de sus casi 6.000 profesores y, en palabras de
Berzosa "
pagar a las constructoras que han realizado trabajos y que, como es natural quieren cobrarlos".
Berzosa, que este lunes inauguró el III Foro del Empleo Universitario, censura que la Comunidad haya roto "unilateralmente y sin avisar" el Plan de Financiación que la propia Esperanza Aguirre firmó con los rectores. Esto podría llevarles a incumplir su compromiso de no endeudarse para tener una universidad sostenible. El rector de la Autónoma, Ángel Gabilondo, suscribe la postura de su homólogo en la Complutense y reclama que se encuentre "una solución técnica" antes de que los centros tengan que tomar otras medidas.
No es la única
La Complutense no es la única en problemas después de que la Comunidad de Madrid reconociese hace una semana que las partidas destinadas a las universidades caerían un 30% como medio para "ajustarse el cinturón" mientras dure la crisis económica.
Distintos portavoces de las universidades de Alcalá de Henares, la Autónoma, la Carlos III, la Politécnica y la Rey Juan Carlos consultados por Madridiario aseguran que, aunque no hasta el punto de la Complutense, todas se encuentran afectadas en un grado importante por el recorte, dado que esas partidas van destinadas a las retribuciones del profesorado y a las infraestructuras.
Diferente caso es el de la Universidad de Educación a Distancia (UNED), que, a pesar de ser la segunda en importancia tras la Complutense -casi 40.000 alumnos en Madrid-, recibe del Gobierno de la Comunidad una aportación mínima, siendo el Estado quien financia el 60% de su actividad.
La solución: el crédito
A pesar de la preocupación en la comunidad educativa, las universidades prefieren no hacer declaraciones públicas ni revelar sus datos de endeudamiento hasta que se encuentre una solución definitiva. Esta podría llegar esta misma semana si existe acuerdo en la reunión que la Conferencia de Rectores de las Universidades Madrileñas (CRUMA) mantendrá con la Consejería de Hacienda.
El primer contacto se produjo este lunes entre el consejero Antonio Beteta y los representantes entrantes (URJC) y salientes (UAH) de la CRUMA, que plantearon la posibilidad de, o bien pedir créditos para sufragar el gasto corriente y la deuda del presente ejercicio, o bien que la Comunidad haga lo propio y transfiera después el dinero a las universidades.
Aunque ninguno confirmó cual será la opción definitiva, tanto Antonio Beteta como el vicerrector de la Rey Juan Carlos, Fernando Suárez, y los gerentes de la Universidad de Alcalá aseguraron por activa y por pasiva que el pago de las nóminas al personal administrativo y los profesores está "absolutamente garantizado" y lo estará en los próximos presupuestos. Así, serán otras partidas las que sufran los recortes, sin que se haya descartado aún una posible subida de las tasas de matriculación.
El consejero de Economía destacó que serán 100 millones de euros los destinados a los docentes. En cambio, criticó que el Estado no dé financiación adicional a las Comunidades Autónomas y que, por ejemplo, niegue a Madrid los ya famosos 418 millones de euros de adelanto de tesorería.
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