"Hay un riesgo alto de terrorismo en España. Los atentados pueden ser indiscriminados e incluso afectar a lugares frecuentados por ciudadanos extranjeros y turistas", explica el Ministerio. La nota recuerda los recientes atentados perpetrados en Mallorca, así como los registrados recientemente en Burgos y Bilbao.
En términos generales, el Ministerio de Exteriores británico considera que las autoridades españolas adoptan las medidas necesarias para proteger a los visitantes extranjeros, aunque advierte de que
"debe permanecerse alerta".
Por último, el Ministerio asegura que los ciudadanos británicos
"no son un objetivo de ETA", pero avisa del peligro de que puedan verse afectados por un atentado.
Por otra parte, la policía científica de la Policía Nacional ha descartado este lunes que la explosión que se produjo en el Bar Nica, situado en el número 29 de la Avenida Conde de Sallent, número 29, en Palma, sea atribuible a un escape de gas metano.
Por ello, se baraja la posibilidad, ya casi segura, de que fuera un cuarto artefacto de la banda terrorista ETA, según informó el propietario del establecimiento,
Fruti Nieto, quien precisó que
"nada es oficial todavía", dado que los agentes policiales continúan aún buscando todos los indicios. Fuentes de la investigación dan por hecho, no oficialmente, que lo colocarían los mismos que los otras tres.
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