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El presidente, que pidió un "esfuerzo colectivo" para salir de la crisis, contestó 40 preguntas

'Yo no prometí', 'yo no dije', 'yo no mentí'... todos lo tienen claro: Zapatero fue acorralado por los ciudadanos

"Yo no prometí", "yo no dije", "yo no mentí"... todos lo tienen claro: Zapatero fue acorralado por los ciudadanos

> Nuestros lectores opinan abrumadoramente que estuvo "mal" o "regular" en su papel
> Éxito de público: la entrevista TVE fue seguida por 6,4 millones de telespectadores

martes 27 de enero de 2009, 07:18h
Zapatero aseguró que en ningún momento se había sentido incómodo, pero la sensación general es que, aunque el presidente tenía bien claro qué papel hacer y cómo contestar a los ciudadanos, no pudo evitar ser arrollado por las preguntas tan evidentes de la ciudadanía por la crisis y el paro. Está claro que fue correcto en las formas y que se preparó bien su intervención, pero no había buenas respuestas para ciertas respuestas si no eran autocríticas. Algo que, de nuevo, no hubo en la actitud del presidente.
El 74% de los espectadores del programa 'Tengo una pregunta para usted' aprobó la intervención del presidente, mientras que el 26% lo suspende, dejando la nota media en un 6 sobre 10, según los resultados de una encuesta de Metroscopia para EFE.

Mientras, los diarios que incluyen en sus primeras ediciones la participación de Zapatero en el programa de TVE resaltan que la crisis económica monopolizó las preguntas. El Mundo y El Periódico destacan la apelación del presidente a un "compromiso" colectivo para superar la crisis. Público dice que Zapatero aguantó "el chaparrón de la crisis y el paro", mientras que ABC dice que estuvo "acorralado" por la crisis. Por su parte, El País resalta la petición del presidente de "seguir consumiendo" a quienes tienen un empleo estable.

Y al término del programa, también opinó al respecto el propio Zapatero. Dijo que debatir con los ciudadanos no era más duro que hacerlo con la oposición en el Parlamento. Además, el jefe del Ejecutivo confió en haber trasladado a la ciudadanía que es "muy consciente" de la crisis y que "vamos a salir adelante".

En cuanto a reacciones políticas, la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, elogió la intervención de su 'jefe', ya que, a su juicio, ha demostrado ser un presidente "sincero", "creíble" y que sabe ponerse en la piel de la gente. Por el contrario, el vicesecretario de Comunicación del PP, Esteban González Pons, consideró que el jefe del Ejecutivo estuvo "espeso, mentiroso, nervioso e incómodo" en su intervención en el programa de TVE.

Desde CCOO, el secretario de Comunicación, Fernando Lazcano, consideró que el presidente estuvo "muy evasivo" en sus respuestas sobre la crisis. Para el presidente de la CEPYME, Jesús Bárcena, la intervención de Zapatero le dejó "más intranquilo" que antes.




Interés social


Lo que está claro es que la entrevista ciudadana tuvo mucho interés para los españoles. El programa fue seguido por 6,4 millones de telespectadores. Concretamente, 6.432.000 de personas siguieron el programa televisivo, que registró una cuota de pantalla del 30,5%.

También hablaron los propios entrevistadores para la ocasión. Las 51 mujeres y los 49 hombres que intervinieron con preguntas lamentaron que sus respuestas fueran estereotipadas: "Las esperadas en un momento de crisis", dijeron. 

La anécdota del día fue la protagonizada por Izaskun, madrileña de 32 años con síndrome de down. Consiguió preguntar al presidente sobre las medidas de integración social y pidió trabajo a Zapatero, quien se guardó en el bolsillo de su chaqueta el currículum. Esta madrileña le hizo ver que todavía quedaban muchos jóvenes síndrome de down sin trabajo.

Entre los lamentos que más se escuchaban tras apagarse las cámaras se oían el de aquellos ciudadanos que se quedaron sin realizar su pregunta. Uno de los descontentos con el presidente era Rafael, un joven de Granada que censuró al Gobierno por la "hipocresía" de mantener un discurso ético sobre la paz y luego seguir vendiendo armas. "Me fastidia este discurso pro-pacifista y que, paralelamente, se multiplique la venta de armas", explicó.

Otro de los acorralamientos vino de manos del sacerdote de Ciudad Real, que preguntó varias veces a Zapatero si creía que el aborto era un atentado contra la vida, a pesar de que, según él, "estaba claro que no podía responder ni sí ni no". Además, ZP estuvo algo desacertado cuando el presentador, Lorenzo Milá, dio paso al sacerdote haciendo público su dedicación religiosa, puesto que el presidente espetó un espontáneo "esto se anima"...

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