www.diariocritico.com

Menos afiliados y subvenciones

Toxo, sin oposición en CCOO: será reelegido por un sindicato debilitado y austero

Toxo, sin oposición en CCOO: será reelegido por un sindicato debilitado y austero

jueves 21 de febrero de 2013, 07:23h
El décimo Congreso Confederal de Comisiones Obreras, que arranca este jueves en Madrid, reelegirá como secretario general para los próximos cuatro años a Ignacio Fernández Toxo. Sin rivales, tras integrar a los críticos en la Ejecutiva en 2009, Toxo planea reducir el número de representantes en el máximo órgano de Gobierno de CCOO a la mitad. La directriz que marcará su reelección es la austeridad. Con menos subvenciones y la caída de afiliados, el sindicato se ha visto obligado a aplicar la receta que tanto ha criticado en los últimos años, despidos y ajustes de plantilla.
La crisis también ha llegado a los sindicatos y el décimo Congreso Confederal de Comisiones Obreras es un claro ejemplo de ello. Para empezar, históricamente los congresos confederales, que se celebran cada cuatro años, han contado simbólicamente con 1.001 delegados. Esto se debe al proceso 1.001, el caso de los 10 fundadores de CCOO encabezados por Marcelino Camacho, que fueron encarcelados en 1972 y luego indultados tras la muerte de Franco. Pues esta vez sólo habrá 750 delegados.
 
Esta austeridad también se refleja en otros aspectos del Congreso como su lugar de celebración. Por primera vez, el sindicato no alquilará ningún centro de convenciones para la reunión, sino que lo hará en el auditorio de su sede madrileña de la calle Lope de Vega, donde están la mayoría de las federaciones.
 
Pero donde más afectará este ajuste de costes será en la propia estructura del equipo directivo que salga del congreso para los próximos cuatro años. Así, la Comisión Ejecutiva Confederal pasará de tener 44 miembros, 23 secretarios y 21 vocales, a un total de 24, 11 o 13 respectivamente, más el secretario general.
 
Esta reducción a la mitad del equipo directivo se debe a razones internas y económicas. Por un lado, ya no será necesario integrar a todas las familias que existían hasta la llegada de Ignacio Fernández Toxo, que a lo largo de los últimos cuatro años se han ido integrando en la dirección confederal sin plantar cara a Toxo, como sí hicieron con su predecesor, José María Fidalgo, hace cuatro años.
 
Lejos queda la incertidumbre con la que se vivió el anterior Congreso en el que la corriente crítica protagonizó una férrea oposición a Fidalgo y consiguió que éste perdiera por apenas 8 votos de diferencia. De aquella noche de abril de hace cuatro años salió un sindicato divido en tres corrientes que había que integrar en la ejecutiva y por ello aumentó su número considerablemente.
 

Delibilidad económica
 
Ahora, sin aparentes guerras internas y con problemas económicos derivados del recorte de las subvenciones públicas de los presupuestos y la caída de ingresos por la menor aportación de los afiliados parados, la ejecutiva reducirá su tamaño. El criterio de eliminación de puestos podría ser, sobre todo económico, ya que desaparecerían los secretarios que eran asalariados del sindicato y conservaría sus puestos aquellos que son liberados de alguna empresa, que les paga el sueldo.
 
En diciembre de 2011, el Gobierno de Rajoy, que acababa de llegar a La Moncloa, anunció la reducción de un 20% de las subvenciones a los sindicatos, que supondría un ahorro de 55 millones de euros en 2012. A la espera de conocer el montante de las ayudas que las centrales recibieron el año pasado, los primeros cálculos lo sitúan en torno a los 220 millones de euros, por lo que una rebaja del 30% a esa cantidad supondría que los sindicatos recibirían en 2013 alrededor de 154 millones. Esa cantidad representa poco más de la mitad de las ayudas que recibieron las centrales el último año de Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Según los cálculos del actual Ejecutivo, en 2011 se concedieron a los sindicatos 275 millones.
 
Además, los Presupuestos Generales del Estado para este año han retirado 1.500 millones de euros en concepto de ayudas a la formación. Por ejemplo, en las partidas destinadas a la financiación de planes de formación en el marco del Acuerdo de Formación para el Empleo de las Administraciones Públicas el tijeretazo ha sido de 14 millones, pasando de 26 a 12 millones.
 
El otro agujero de Comisiones Obreras es la pérdida de asociados. El sindicato cerró 2012 con una afiliación media de 1.143.000 personas, lo que supone un descenso de 60.300 sobre el máximo alcanzado en 2009 (1.203.309). La caída es del 5%, según un informe del sindicato, que se va a presentar en el congreso.
 
Esta pérdida de afiliados ha provocado unos menores ingresos por ese concepto para el sindicato, que en 2011 fueron de 156 millones de euros, frente a los 162 de 2010 y los 159 de 2009. El sindicato explica que el empobrecimiento generalizado, fruto de la pérdida del puesto de trabajo y de las rebajas salariales y de las pensiones, con el consiguiente ajuste de las economías domésticas, ha comportado, sobre todo a partir de 2011, un significativo aumento de las bajas rompiendo la tendencia de crecimiento característica en el ciclo anterior. En el mejor de los casos ha supuesto un trasvase de cuotas de la general a la reducida. Ambas dinámicas han comportado una apreciable reducción de los ingresos por cuotas.
 

Despidos baratos
 
Por estos problemas económicos el sindicato ha despedido a 300 trabajadores en el último año, usando en algunos casos las facilidades y los despidos baratos que ofrece la reforma laboral que tanto han criticado y contra la que han convocado una huelga general.
 
En Castilla y León, 25 trabajadores de administración y personal de limpieza de la Fundación Formación y Empleo de Castilla y León, vinculada a CC.OO, han perdido sus puestos en mayo con una indemnización de 20 días por año. Algo parecido se vivió con anterioridad en Forem Galicia, donde CC.OO aplicó sin miramientos la ley mediante un ERE a 26 trabajadores, y en Forem Castilla La Mancha, con 15 despidos y 22 extinciones de contrato por medio año. En la Federación de Aragón se aprobó un ERE temporal que afectó a 123 de sus 138 empleados, en Cataluña redujo su plantilla en 50 personas con bajas voluntarias y prejubilaciones, y en Andalucía despidió a 20 trabajadores indefinidos.
 
El sindicato también ha acordado con los empleados de su Comisión Ejecutiva una modificación del convenio colectivo vigente con el fin de preservar sus puestos de trabajo hasta 2014. De esta forma, sus sueldos se verán incrementados entre un 0,5% y un 1,5%. Lo llamativo es que se desvincula la evolución salarial al IPC y queda referenciada al crecimiento del PIB de la economía española.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
1 comentarios