La portavoz del gobierno regional, Noelia Arroyo, ha asegurado que el presidente José Antonio Sánchez no va a dimitir porque el 'Caso Auditorio' no es un caso de corrupción política y escapa por tanto al pacto de gobierno firmado entre el PP y Ciudadanos.
A José Antonio Sánchez se le atribuyen presuntos delitos de prevaricación continuada, fraude contra la administración pública, falsedad en documentos oficiales y malversación de caudales públicos por el Auditorio de Puerto Lumbreras cuando fue alcalde del municipio. Sánchez tendrá que declarar en calidad de investigado el próximo día 6 de marzo.
Sin embargo, el PP sostiene que no es un caso de meter la mano en la caja sino de averiguar si se ha metido la pata. "En el acuerdo de investidura habla de corrupción política y aquí no hay corrupción política", manifestó Arroyo.
En la misma línea se pronunció el portavoz popular en el Congreso, Rafael Hernández, quien ha defendido que el momento de exigir responsabilidades políticas es con la apertura de juicio oral.
Por su parte, Ciudadanos ha solicitado la dimisión del presidente murciano si bien asegura que aún no tiene un plan b si éste se mantiene en su inmovilismo.
En cambio, Podemos sí ha anunciado que promoverá una moción de censura y el PSOE no descarta apoyarla.
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