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No hay margaritas para Ángel Pérez

No hay margaritas para Ángel Pérez

martes 19 de junio de 2007, 19:34h
Curiosísima relación epistolar la que ha dado lugar el ‘me quedo-me voy’ del diputado de IU y ya concejal en el Ayuntamiento madrileño, Ángel Pérez. Tan curiosísima, que a Pérez ya no le quedan margaritas que deshojar: no se queda, se va.

La historia, en realidad, es muy sencilla. La situación de IU en Madrid es como siempre ha sido la situación del PCE en Madrid; es decir, un desastre:
corrientes internas, atomización, cada grupo por su lado, etc., etc. Y eso no ha cambiado, como tampoco ha cambiado, por tanto, el equilibrio de poder –la búsqueda del mismo, se sobreentiende- ni las legítimas o no tanto aspiraciones de cada uno, que en este caso es cada cual.
   
Valga la anterior entradilla para explicar esa curiosa relación epistolar a que ha dado lugar la permanencia o no de Ángel Pérez en su escaño en el Congreso. La cosa es así de simple: el pasado 13 de junio, el secretario general del Congreso, Manuel Alba, recibió una carta de Ángel Pérez comunicándole su intención de, dado que no es incompatible ser diputado y concejal, permanecer en su escaño parlamentario.
   
La carta de Pérez fue filtrada a la prensa a primeras horas de este martes, y un poco después –exactamente a las 12:52 horas- en la sede federal de IU se recibió por fax -a nombre de Gaspar Llamazares, coordinador general, y de Manolo Cámara, secretario de Organización- una carta de IU de Madrid, fechada un día antes y firmada por Fernando Marín, coordinador general de IU-CM, y Carlos Penit, secretario de Organización, diciendo que, dado que el artículo 55 de los Estatutos de IU señalaban la incompatibilidad de escaños, Pérez permanecería en el Congreso lo justo y necesario para resolver sus cuestiones pendientes. Ni un día más.
   
Poco después, en los medios de comunicación se recibía una nota en la que se señalaba que Ángel Pérez cesaría como diputado para dedicarse plenamente a su labor municipal en el Consistorio madrileño. ¿Comprenden la jugada?
   
Resulta muy simple: Pérez vino a decir a la Secretaría General del
Congreso: "Me quedo en el escaño"; IU Madrid respondió inmediatamente: "Se queda, pero poco", e IU federal re-respondió más rápidamente: "Ni poco, ni mucho, ni nada". Así de sencillo. Y es que en IU-Madrid hay mucha ‘mar detrás’; tanta, que viene con resaca.
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