Se complica el caso de la izquierda abertzale y su ilegalización, como pide al Gobierno de Rajoy los sectores más conservadores de su base social. El Ministerio del Interior cuenta con informes de la Fiscalía y la Abogacía del Estado que desaconsejan por falta de pruebas instar a la ilegalización de Amaiur y Bildu, la dos formaciones abertzales con presencia parlamentaria, así que todo se calma de cara a iniciar procesos judiciales.
Así hablaba este martes el titular de Interior,
Jorge Fernández Díaz, al respecto: "En estos momentos la Fiscalía del Tribunal Supremo y la Abogacía del Estado tenemos informes en base a los cuáles nos dicen que sobre los elementos probatorios que han aportado la Policía y la Guardia Civil, no existen pruebas razonables para promover con éxito ese incidente de ilegalización (de Bildu y Amaiur)". Así que de forma lapidaria, el ministro dejó claro que, "si no hay pruebas suficientes", el Gobierno "haría un mal favor a la democracia promoviéndolo".
Sus palabras se han analizado como una muestra de poder del Gobierno frente a las bases sociales del PP, a sectores del partido y de la prensa conservadora, que exigen que Rajoy arregle una situación de la que se acusa al anterior Ejecutivo, el socialista de
José Luis Rodríguez Zapatero. Pero
Mariano Rajoy y su equipo saben que tendrán complicado actuar ahora, una vez que se permitió que Amaiur, en el Congreso y el Senado, y Bildu, en el Parlamento navarro.
Sin embargo, más que los 7 escaños conseguidos en el Congreso de los Diputados preocupa a estos sectores el hecho de que en las próximas elecciones autonómicas en el País Vasco, Bildu o cualquiera de las formaciones que presente la izquierda abertzale, obtengan unos resultados previsiblemente arrolladores. Incluso
se ha especulado con que Arnaldo Otegi, una vez consiga salir de prisión, sea un futuro dirigente político, ya sea como lehendakari o como hombre de peso en el Ejecutivo vasco, seguramente bajo una coalición con el PNV que desbancara al pacto de gobierno entre PSE y PP.
Además, la izquierda abertzale se cubre judicialmente, bien aconsejado por sus servicios jurídicos. Si este pasado fin de semana dijo aquello de que lamentaba la violencia y los asesinatos de ETA durante tantos años de horror en todo el territorio nacional (incluso en Francia), este miércoles ha hablado Amaiur. Su portavoz en el Congreso,
Iñaki Antigüedad, insta a ETA a dar pasos hacia adelante pese a que en estos momentos el Gobierno de Rajoy no esté atendiendo a ninguna de sus peticiones, como en política penitenciaria.
Lo ha dicho en una entrevista en 'Cataluña Radio', aunque insistiendo en las tesis revisionistas del concepto de víctimas, que incluye a las del Estado, discurso oficial de la izquierda abertzale, condenada por los partidos constitucionalistas. Antiguedad ha instado a que en el debate se pongan sobre la mesa las "víctimas y los centenares, miles de torturados" por parte del Estado y ha considerado que el diálogo "no puede basarse en que unos dicen que son demócratas de toda la vida" y otros, no.
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