En concreto, IU había registrado tres enmiendas parciales para minorar en un total de 412 millones de euros el dinero que se dedica a esta partida.
"El almacén nuclear genera un gran rechazo social, que pone en peligro la agricultura, la ganadería y los proyectos de turismo rural de toda la zona, además de los riesgos añadidos para la seguridad en todas las comarcas por las que transcurre el transporte ferroviario y por carretera de estos residuos altamente tóxicos", argumentaba IU en sus enmiendas.
La formación defendía que este dinero se podría dedicar a otras actividades, "dada la preocupante situación social de Castilla-La Mancha", una de las regiones en las que "más ha crecido el paro, la desigualdad social y el riesgo de pobreza en el último año, con una tasa de cobertura por desempleo diez puntos por debajo de la media nacional, y una tasa de paro juvenil del 60%".