Así lo ha señalado en Sevilla el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, quien ha apuntado que el Ejecutivo central está a la espera de saber "si hay una suspensión cautelar" de la misma.
Según ha asegurado, se trata de un asunto de "seguridad nuclear en toda España" porque "España está exportando residuos a Francia, pero tienen que empezar a retornar a mitad del año 2017 y si no se cumplen los plazos tendremos un problema de seguridad nuclear".
"Este proyecto lo inició, con buen criterio, el gobierno socialista en 2006 y al inicio de esta legislatura estaba todo ultimado a falta de elegir un emplazamiento de los cuatro preseleccionados por el gobierno anterior", ha subrayado.
Sin embargo, ha afirmado que el Gobierno socialista de Castilla-La Mancha ha dado "marcha atrás" porque "Podemos le puso como condición que se desdijera en este proyecto".
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha declarado que para que el emplazamiento del silo nuclear sea declarado de interés general "el Gobierno tendrá que acreditarlo ante la Unión Europea y demostrar que la posibilidad de instalarlo en Villar de Cañas es la única y que no hay otra alternativa".
"No soy dramático. No digo que la energía nuclear sea buena o mala. La basura nuclear hay que tratarla y no entro en ese debate, pero lo que sí digo es que aquí hubo un acuerdo entre María Dolores de Cospedal y el ministro de Industria, y después del 'conchabeo' se hicieron los estudios de seguridad con muchas dudas", ha enfatizado a la Cadena Ser.