La Ley del Libro, por unanimidad

Las enmiendas presentadas por la Entesa Catalana y aprobadas por la Cámara Alta hacen referencia a la igualdad de las lenguas existentes en el Estado en el marco de las campañas de promoción de los autores, y a la inclusión de los libros de texto y material didáctico de la Educación Infantil dentro de la liberalización del precio en los libros de texto.

El portavoz de Entesa Catalana de Progrés, Miquel Bofill, manifestó su "sorpresa" por la aprobación de estas enmiendas, sobre todo por parte del grupo popular, y resaltó la importancia de la liberalalización del precio del libro de texto no sólo en primaria y secundaria, sino también en la educación infantil.

A pesar de todo, el senador catalán insistió en la "invasión de competencias" de la Ley del Libro, aunque reconoció que muchas enmiendas, referentes a materias competenciales han sido aprobadas durante la tramitación parlamentaria de esta Ley.

Por su parte, la ministra de Cultura, Carmen Calvo, agradeció a los grupos parlamentarios el "trabajo" y el "esfuerzo" realizado para llegar un grado de consenso "encomiable" con esta Ley que la ministra describió como "rigurosa", "precisa", "actual", "democrática" y "social".

Gran consenso

Asimismo, resaltó la dotación económica de 431 millones de euros que lleva implícita esta Ley, que incorpora nuevos conceptos en relación a la definición de Libro y que defiende el precio único de los libros, a excepción de los manuales escolares.

Respecto a los textos escolares, la titular de Cultura aclaró que el precio libre "tiene que fijarlo el detallista" al ser modificado el sistema vigente que impera desde el año 2000 y que apoyaba el descuento ilimitado, que según la ministra, ha producido "graves perjuicios" a las pequeñas librerías. "La ley es realista porque atiende a la diversidad empresarial y la cultural", subrayó la ministra.

"El sistema que establece la Ley respecto a los libros escolares es mejor que la liberalización de los descuentos que ha sido demoledor para las librerías", insistió el senador socialista, José Fernández Blanco.

Precio fijo en los libros de texto

El precio único también para los libros de texto fue una de las principales reclamaciones presentadas hoy por IU (GPMX) y su portavoz  Eduardo Cuenca Cañizares, quien indicó que pedían un precio estipulado porque "da tranquilidad al usuario".

Asimismo, criticó que la Ley no reconociera algunas competencias de las Comunidades Autónomas y criticó el establecimiento del canon bibliotecario "porque aunque lo paguen el ayuntamiento o las Comunidades Autónomas se restará de la inversión en puestos de lectura o en libros", alegó.

Respecto a los problemas competenciales, la senadora y presidenta de la Comisión de Cultura, Isabel Flores Fernández, indicó que el texto es "respetuoso" con las competencias de las Administraciones y "garantiza e impulsa la cooperación entre ellas". Por otra parte,  lamentó que se interpreten las directivas de manera "demagógica" y malintencionada, porque el canon bibliotecario "nunca afectará al usuario".

Por su parte, el senador popular Juan Van-Halen destacó el consenso logrado en esta Ley "buena" e "importante" con la que sólo tenemos "discrepancias menores", reconoció.