¿Sirvió para algo la Conferencia sobre ETA? De poco o nada

En medio de enorme controversia, se desarrolló en San Sebastián la Conferencia de Expertos internacionales convocada para reclamar a la banda ETA que, de una vez y para siempre, cese la actividad armada. Primera comprobación: los reunidos están persuadidos de que ha llegado la hora y la posibilidad de finalizar la última confrontación armada en Europa, y de que ese objetivo puede ser alcanzado ahora con el apoyo de toda la ciudadanía, de sus representantes políticos y con el de Europa y de la comunidad internacional. Dicen también los expertos internacionales que no viajaron a Donosti para imponer algo o pretender que tenemos el derecho o la autoridad de dictar a la ciudadanía de este país, a sus diversos actores y a sus representantes políticos, qué se debe hacer, sino con buena fe y con la esperanza de poder ofrecer ideas desde nuestra propia experiencia resolviendo largos conflictos que afligieron a nuestras propias sociedades y pueblos, así como de otros que ayudamos a resolver. Insisten en su buena y útil experiencia, que puede resultar útil para terminar con una situación de violencia y conflicto y lograr una paz duradera, algo que nunca es fácil, y que requiere valentía, voluntad de tomar riesgos, compromisos profundos y generosidad y visión de hombre de Estado.


Argumentan  luego que la paz viene cuando el poder de la reconciliación pesa más que los hábitos del odio, cuando la posibilidad del presente y del futuro es infinitamente mejor que la amargura del pasado. Y reiteran que la creciente exigencia de la ciudadanía de este país y sus representantes políticos para superar el conflicto mediante el diálogo, la democracia y la completa no violencia, ha creado esta oportunidad. En base a lo cual, proponen terminar hoy con más de 50 años de violencia y alcanzar una paz justa y duradera, sobre cinco puntos: Primero, un llamamiento a ETA a hacer una declaración pública de cese definitivo de la actividad armada y solicitar dialogo con los Gobiernos de España y Francia para tratar exclusivamente las consecuencias del conflicto. Añaden los expertos que "Si dicha declaración, de ETA, fuese realizada, instamos a los Gobiernos de España y Francia a darle la bienvenida y a aceptar iniciar conversaciones para tratar exclusivamente las consecuencias del conflicto. En tercer lugar, se insta a adoptar pasos profundos para avanzar en la reconciliación, reconocer, compensar y asistir a todas las víctimas, reconocer el dolor causado y ayudar a sanar las heridas personales y sociales. Recuerdan que, en la solución de conflictos, hay a menudo otras cuestiones que sin son tratadas pueden ayudar a tratar de alcanzar una paz duradera. Y sugieren que los actores no violentos y representantes políticos se reúnan y discutan cuestiones políticas, así como otras relacionadas con el respeto, con consulta a la ciudadanía, lo cual podría contribuir a nueva era sin conflicto. Sostiene la declaración que las terceras partes observadoras o facilitadoras ayudan al diálogo, que también podría ser asistido por facilitadores internacionales si así fuese decidido por las partes involucradas. Por ultimo, su disposición a  organizar un comité de seguimiento de estas recomendaciones...


¿Hay algo más que palabras-palabras? A simple vista, "no es esto, no es esto". Es claro que ETA tiene ahora que dar el primer paso, pero es difícil que se puedan satisfacer las exigencias que se sugieren los gobiernos de España y Francia, o a las terceras partes y facilitadotes.


La gran aspiración de la ciudadanía es mucho más simple: anuncien de una vez su final y extínganse con el menor ruido posible. Ya hicieron demasiado en medio siglo...