La UE pregunta y escucha: ¿cómo es el futuro que quieres para Europa?

La mayoría de españoles sigue considerando beneficioso pertenecer a la UE, según el último Eurobarómetro hecho público este jueves. Sin embargo, la mayoría de los que dicen tener una imagen neutral o positiva de la UE ha bajado 8 puntos y en cambio ha aumentado 6 lo que tienen una visión negativa de la Unión. Es decir, la crisis ha hecho mella en el proyecto común en nuestro país. No obstante, el 51% sigue apostando por la pertenencia a este 'club' y el 43% dice sentirse "español y europeo". Un sentimiento que se ve potenciado más allá de nuestras fronteras ya que a nivel global el estudio señala que el 40% de los europeos tiene una opinión favorable de la UE frente al 31% que alcanzaba en noviembre de 2011.

Precisamente, para atraer a más ciudadanos hacia el proyecto europeo, la Comisión Europea puso en marcha el 9 de mayo una consulta histórica coincidiendo con el Día de Europa. Esta consulta abierta consiste en un cuestionario para conocer cómo es la UE del futuro que quieren sus ciudadanos que está disponible a través de internet hasta este domingo 9 de septiembre.

En este test cuyas respuestas pueden rellenarse en apenas cinco minutos se pueden contestar a preguntas tipo: "¿Alguna vez ha tenido problemas para abrir una cuenta bancaria en otro país de la UE?; en su opinión, ¿las víctimas de un delito cometido en la UE deben poder recibir una compensación financiera del Estado o el delincuente por los daños causados, con independencia de dónde vivan?; ¿Qué podría motivarle más para participar con su voto en las elecciones al Parlamento Europeo?; si residiera en otro país de la UE, ¿le parecería justificado perder su derecho a votar en las elecciones nacionales de su país de origen?; ¿Qué significa para usted la ciudadanía de la UE?"...

Una serie de preguntas clave a las que ya han respondido ya miles de ciudadanos de la UE que quieren contribuir con sus aportaciones a la construcción activa del proyecto europeo. Una iniciativa obligada ya que la mayor integración encaminada hacia la Unión Económica y Monetaria debe ir acompañada de un respaldo mayor de legitimidad democrática y participativa, tal y como se señaló en el Consejo Europeo de junio.