La candidata del PP a la Presidencia de la Comunidad ha querido marcar distancia entre ella y la candidata 'popular' al Ayuntamiento y Presidenta del partido en la Comunidad, Esperanza Aguirre, declarando que "su responsabilidad se cirnscuncribe a la lista que ella encabeza". En su opinión tanto Aguire como Presidenta de los populares madrileños como Ignacio González como todavía Presidente de la Comunidad, son los que deben decidir sobre el futuro de los consejeros madrileños imputados en la Púnica Salvador Victoria y Lucía Fígar.
La candidata del PP a la Comunidad de Madrid,
Cristina Cifuentes, ha asegurado hoy que el presidente autonómico,
Ignacio González, y la presidenta del PP de Madrid,
Esperanza Aguirre, son quienes deben decidir si los consejeros imputados en el caso Púnica,
Salvador Victoria y
Lucía Figar, deben dimitir.
Así se ha expresado en una rueda de prensa para dar a conocer el código ético suscrito por los diputadas electos del PP y en la que
Cifuentes ha reconocido que la imputación de estos miembros del Gobierno regional es una "noticia muy mala", aunque ha recordado que son personas que no forman parte de la lista electoral que ella encabeza.
"Mi responsabilidad se tiene que circunscribir a aquella lista electoral que yo encabezo y al grupo de diputados que yo lidero", ha especificado
Cifuentes, quien ha dicho que no trata de desmarcarse de la imputación de sus compañeros de partido.
La candidata del PP a la Presidencia de la Comunidad, que hoy se ha reunido con su colega del PSOE,
Ángel Gabilondo, ha asegurado que "cualquier" caso de corrupción es "terrible" y perjudica a toda la ciudadanía.
"Me da igual que afecte a
Tania Sánchez o a
Salvador Victoria", ha comentado
Cifuentes, quien ha lamentado que los casos de corrupción "no ayudan" a que la ciudadanía recupere la "confianza" en los partidos políticos, por lo que ha pedido que la Justicia actúe "de la manera más rápida posible".
La exdelegada del Gobierno en Madrid ha asegurado que ella y la mayoría de sus colegas están en política "por vocación" de servicio público y para "servir al ciudadano y no para servirse de él".
Cifuentes ha explicado que todos los diputados electos del futuro grupo parlamentario del PP han firmado un código ético que supone un compromiso contra la corrupción y a favor de la regeneración política y la transparencia.
Según este código ético, los diputados electos del PP presentarán su renuncia al escaño si son imputados o investigados formalmente por algún asunto relacionado con corrupción política.
Para que este documento "adquiera carácter oficial",
Cifuentes ha señalado que se lo entregarán al futuro presidente de la Asamblea de Madrid para que sea incorporado a la documentación personal de cada uno de los diputados.
Sobre la marcha de las negociaciones para formar Gobierno, ha indicado que ella mantiene sus expectativas de ser presidenta y ha instado a Ciudadanos a decidir si quiere permitir un Ejecutivo elegido "mayoritariamente por los madrileños o prefiere elegir la alternativa de gobierno que ha sido elegida por una parte pequeña de los ciudadanos".
En cuanto a la reunión que ha mantenido con Gabilondo, ha explicado que ha sido "absolutamente cordial" y que han abordado la configuración de la mesa del Parlamento madrileño. En este sentido, ha subrayado que han coincidido en la "importancia" de que todos los grupos parlamentarios estén presentes en los órganos de gobierno de la Cámara, incluso Ciudadanos que quedaría fuera si se aplicase estrictamente la aritmética parlamentaria.
Cifuentes ha reconocido que ha trasladado a Gabilondo su deseo de que el PP, como grupo más votado, presida la Asamblea, mientras que éste le ha manifestado que cree que son los socialistas, como segunda fuerza con más votos, los que deberían hacerse con la presidencia del Parlamento regional.
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