¿Quién cree a Pablo Iglesias?

Es la pregunta que muchos se hacen en estos momentos... votantes, simpatizantes de Podemos, analistas, expertos... todos ellos es preguntan: ¿se puede creer a Pablo Iglesias? ¿Son sinceras sus disculpas en el ya famoso vídeo? ¿Ha pasado de fase en su guerra interna por el poder en el partido a una fase más tranquila una vez que ha medido sus fuerzas?

Todo ello es lo que parece estar barajando el secretario general de Podemos después de ganar a duras penas a Íñigo Errejón en la última votación, referente a las propuestas políticas de cara al Congreso de Vistalegre 2, que se celebrará en febrero.

Iglesias pedía ayer perdón a las bases por la guerra interna dentro del partido en un vídeo en el que llama a "parar esa espiral de torpeza" y a recuperar la unidad, en respuesta a un mensaje enviado por una militante. "A todos los que confiasteis en nosotros como Teresa, perdonadme, sé que os estamos avergonzando", apuntaba el líder de Podemos, con mayor o menor grado de sinceridad.

"Si los medios de comunicación y las redes sociales siguen siendo el escenario donde intentamos lavar nuestros trapos sucios destruiremos Podemos", añadió, y reconoció que lo que pensaban que podía ser un "debate sano" se ha convertido en "la mejor arma" de sus "enemigos". Iglesias reconoció que en Podemos no todos piensan igual y considera que el debate es "imprescindible", por lo que prometió esforzarse para llegar a acuerdos y para que las diferencias les "enriquezcan" y no los separen. "Pero si no lo conseguimos y los inscritos deben elegir entre diferentes proyectos y entre mi lista, la de Íñigo, la de Miguel o las que haya, intentaré que después sigamos caminando juntos", añadió.

Pocas horas después, Errejón decía en Twitter: "Gracias Pablo Iglesias. A Podemos le toca madurar como organización y a todos nosotros estar a la altura de las esperanzas que hemos despertado". Poco más. Ahora falta conocer si estas buenas palabras de ambos 'contendientes' se traducirá en una nueva fase de tranquilidad en Podemos.

Algo que parece complicado porque mientras la etiqueta imperaba, los diputados de Podemos en la Asamblea de Madrid ratificaban por un voto de diferencia la decisión del Consejo Ciudadano de cesar a José Manuel López como portavoz parlamentario y de nombrar a Lorena Ruiz-Huerta como su sucesora. En una entrevista en EL PAÍS, López apunta que su deseo es un partido "donde la disensión no sea un problema".

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