'Better call Saul' 3x02: el reencuentro con Los Pollos Hermanos

El mayor de los McGill sigue demostrando que es tan meticuloso a la hora de planificar sus golpes como el mismísimo Mike Ehrmantraut, dos hombres con la paciencia suficiente como para lograr sus objetivos. Con el capítulo de hoy hemos comprobado como Chuck no tuvo ningún despiste cuando dejó escuchar a Ernie la grabación acusatoria de Jimmy, todo era parte de su plan de conseguir que su hermano intentara destruir la cinta. Puede que no predijera bien el impacto emocional que iba a suponer para él, pero al final consigue lo que quiere y ya tiene a su hermano acorralado. El timador timado, parece que los McGill saben como preparar una buena trampa. Claro que, como decía, Chuck es mucho menos impulsivo y más preciso y frío que su hermano. Como se puede ver en otro momento, cuando nos comparan la forma de 'espiar' de Jimmy con la minuciosidad y tranquilidad con la que lo hacía Mike en el capítulo anterior. Las diferencias van mucho más allá de la locuacidad de uno comparada con la parquedad de palabras del otro. Si Mike es capaz de descomponer un coche pieza a pieza en busca de algo, Jimmy es mucho más compulsivo y poco paciente. Los creadores saben jugar con la noción de que el espectador sabe quién lleva Los Pollos Hermanos, otro tipo tan frío y metódico como Gustavo Fring, mientras Jimmy espía torpemente para Mike, echando sal en vez de azúcar al café y sin probar ni un bocado de su 'Pollo clásico', antes de abandonar el establecimiento sin haber descubierto nada, Fring ya le tiene en su punto de mira.

Puede que la paciencia no sea el fuerte de Jimmy, como bien demuestra a la hora de elegir a los empleados para su nuevo bufete con Kim, pero es bueno en lo suyo y el negocio con los ancianos va viento en popa. Claro que, tras el engaño de Chuck y su irrupción en casa de este para destrozar las pruebas, su futuro como abogado no es nada halagüeño. De poco sirve que Kim se haya mostrado a su lado y se haya convertido en su abogada de facto, previo pago de 20 dólares, Chuck no va a dejar escapar a su víctima fácilmente y ahora mismo Jimmy está contra las cuerdas y a un paso de, como mínimo, la inhabilitación. Por su parte Mike se ha visto expuesto tras la torpeza de Jimmy y dentro de poco estará cara a cara con Gus Fring, puede que el narco termine formando parte de la venganza de Jimmy. Y es que parece claro que la guerra está desatada entre los McGill y el penúltimo vínculo de Jimmy con la legalidad, la familia, ha quedado hecho pedazos. Es muy bueno el detalle en el que Jimmy comienza a despegar la cinta de la pared con el nuevo logo del bufete Wexler-McGill cuidadosamente, como le ha enseñado Chuck, y cuando se da cuenta la arranca con furia.

Saul Goodman espera a la vuelta de la esquina y Kim parece ser el último agarre de Jimmy.