Sin embargo, no todo podía quedar pefecto. Como cuando Jordi Évole, antiguo 'Follonero', ahora periodista mediador y sosegado, les preguntó sobre las cifras del paro en Cataluña. Ambas demostraron desconocimiento de los datos exactos, para sorpresa de todos. Las dos se fueron por las ramas, como buenas políticas cuando no pueden concretar sobre una idea. Évole se lo tuvo que soplar: 12,5% de paro según la última EPA. Tampoco manejaban bien otras cifras como las de refugiados en Cataluña (1.169), las de barracones en las escuelas públicas (1.017) o la de mujeres asesinadas por violencia de género (8).
Pero hubo otros temas clave. Por ejemplo, la pregunta a Arrimadas sobre qué pasaría si el independentismo gana en escaños y votos: "¿Se plantea un referéndum pactado en Cataluña?". Curiosa fue otra pregunta que en este caso realizó a Rovira: dijo que es catalán y vive en Cataluña, por lo que quería saber si vive "en una república". Rovira le contestó que "sí": "En una república proclamada el pasado y no implementada". "Lo primero que vamos a hacer es intentar dejar en libertad a los presos políticos", aseguró.
Las chispas surgieron en temas como el de los reproches y calificativos mutuos. Rovira aseguró que "Arrimadas ha asistido a manifestaciones en las que hay muestras claras de grupos de ultraderecha que son fascistas". La líder de Cs entró al pique: "Que quieras vincular una manifestación de un millón de personas con grupos de ultraderecha te retrata. No se me va a ocurrir en la vida criminalizar a la gente que sale en la Diada aunque cerca de allí se quemen banderas de España". También la increpó en otra ocasión cuando le preguntó: "¿Declararme persona non grata en Llavaneras es resolver discrepancias o es señalarme?". "Yo me disculpé", contestó Rovira, que apuntó que "declarar personas non gratas no es un instrumento adecuado".
En el otro extremo, Évole les puso el difícil reto de decir la una de la otra lo mejor que veía en ella. Arrimadas destacó de la dirigente de ERC que es "una mujer valiente", mientras que Rovira dijo que se necesitan "mujeres referentes y que tomen decisiones en política piensen como piensen", virtud que vio en Arrimadas.
Los famosos "muertos en las calles"
Sobre la reciente polémica por las declaraciones de Rovira en una radio sobre que el Gobierno central había amenazado con "muertos en las calles" en caso de continuar el procés soberanista, Évole se lo reprochó: "¿Cree que se puede decir esto sin aportar pruebas?". Rovira apenas pudo razonar sus motivaciones y sólo dijo que Puigdemont le había dado la razón y que había servido al menos para dejar claro que nunca habría amenazas de este tipo.
Ante la repregunta de si tenía pruebas, evidenció que no tenía salvo que "le había llegado información a Puigdemont" al respecto. "Yo ya he hecho lo que tenía que hacer, poner información encima de la mesa". "No voy a aportar más pruebas", sentenció, como si ya hubiera aportado alguna. Arrimadas le reprochó: "Decir que nos iban a matar por la calle es inmoral, tienes una oportunidad para pedir perdón (...) "No tienes derecho a hacer esas afirmaciones, porque lo que haces es generar odio. Eres una responsable política de primer nivel, lo que dijiste es una barbaridad intolerable".
Reciba gratis en su móvil 
Si (
No(
