Una postura europea fija sobre Arabia Saudí, la esperanza española para no tener que mojarse

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, establecerá el miércoles en su comparecencia en el Congreso la posición de España sobre la venta de armas a Arabia Saudí. En este sentido, el ministro de Exteriores, Josep Borrell, no quiso valorar la petición alemana de que los países de la UE dejen de vender armamento a Arabia Saudí mientras no se aclare la muerte del periodista Jamal Khashoggi, y se remitió a la intervención del presidente del Gobierno en el Congreso.

Borrell subrayó que el Gobierno ya emitió el pasado sábado un comunicado "rotundo y claro" sobre este asunto. En el mismo, el Gobierno español se declaraba "consternado por las informaciones preliminares de la fiscalía" sobre la muerte del periodista saudí, y tras expresar el pésame a sus allegados, se unió al llamamiento al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, para que "los responsables de estos gravísimos hechos respondan ante la justicia tras una investigación exhaustiva y transparente".

Por su parte, el PSOE expresó su apoyo a la "prudencia" del Gobierno, en su decisión de esperar al resultado de la investigación sobre la muerte de Khashoggi en el Consulado de Arabia Saudí en Estambul para tomar cualquier decisión. La portavoz del Comité Electoral del PSOE, Esther Peña, se mostró convencida de que el Ejecutivo de Sánchez, una vez que conozca las conclusiones, actuará "en beneficio de los intereses de España".

Mientras, el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, pidió ayer al Gobierno que paralice la venta de armas a Arabia Saudí, al igual que ha hecho Alemania. Iglesias planteará esta reclamación a Sánchez en su comparecencia del miércoles en el Congreso. En su opinión, se trata de un "mandato ético y democrático".

En líneas generales, los diarios señalan que el Gobierno no tiene intención de seguir la estela de Alemania y suspender la venta de armas a Arabia Saudí. Así lo refleja EL PAÍS, que dice que el Gobierno cuenta con el apoyo de PP y Ciudadanos. También EL MUNDO destaca que "España se resiste a la petición alemana de no vender armas a Riad", y de momento espera a que concluya la investigación sobre este asunto. LA VANGUARDIA resalta que "España demora su decisión sobre la venta de armas a Arabia Saudí", mientras que EL PERIÓDICO dice que "España se pone de perfil" en esta crisis. Este diario apunta que el Gobierno reconoce tener poco margen, y que "los comicios andaluces, con Navantia de fondo, dificultan más la posición de Sánchez". Por su parte, ABC titula: "El Gobierno 'actuará en interés de España' en el caso Khashoggi". Según LA RAZÓN, "el Gobierno mantiene la venta de armas a Arabia Saudí".

La investigación por el caso Khashoggi continúa

Las autoridades turcas ultiman la investigación de la muerte del periodista saudí, y esperan ofrecer hoy los resultados de la misma. El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, y su homólogo estadounidense, Donald Trump, mantuvieron el domingo una conversación telefónica, en la que coincidieron en que todos los detalles de este caso deben ser aclarados.

Precisamente, Trump dijo ayer no estar "satisfecho" con las explicaciones dadas por el Gobierno saudí sobre la muerte de Khashoggi. El portavoz del Pentágono, Rober Manning, reconoció ayer que la muerte del periodista saudí podría afectar la relación militar entre EEUU y Arabia Saudí, aunque supeditó a la Casa Blanca cualquier decisión al respecto.

La primera ministra británica, Theresa May, dijo ayer en la Cámara de los Comunes que se debe llegar a "la verdad" sobre la muerte de Khashoggi. Por su parte, el ministro de Exteriores británico, Jeremy Hunt, pidió que se esclarezca quién autorizó la llegada de 15 agentes saudíes a Estambul el mismo día en el que murió Khashoggi. En su comparecencia parlamentaria, Hunt aseguró que la versión ofrecida hasta el momento por las autoridades saudíes no es "creíble".

Los diarios publican hoy fotogramas de un video difundido por la CNN en el que se puede observar a uno de los funcionarios saudíes abandonando el consulado vestido con las ropas de Khashoggi, en un intento de ocultar el crimen y defender que el periodista salió del consulado sin problemas.