El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, dijo ayer no apreciar señales de que pueda existir una nueva burbuja inmobiliaria en España, al comparar la situación actual con la previa a la crisis, pues, según explicó, el crecimiento del crédito actual es similar al de los años que precedieron al estancamiento, ni el peso de la construcción se sitúa en los niveles de entonces.
Según el gobernador, "hoy estamos alejados de un proceso excesivo de crédito, las empresas no financieras han reducido su deuda en 40 puntos porcentuales y las familias en 20 puntos porcentuales", entre otros aspectos.
Durante su intervención en el 14º Encuentro del Sector Bancario, organizado por IESE, momento que aprovechó para enviar un mensaje "de tranquilidad" respecto a una posible burbuja. En todo caso, Hernández de Cos advirtió sobre la "indebida" relajación de los criterios en la condición de crédito al consumo con tasas de expansión crediticia que situó entre el 15% y el 20% y la morosidad asociada a esta actividad que, según añadió, "ha comenzado a elevarse sustancialmente.
Además, el gobernador alertó sobre la "significativa" reducción del número de oficinas y negocios en España que supera en el primer caso el 40% y en el segundo el 30%, respecto a los niveles de 2008.
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