No es nada frecuente que en nuestros escenarios se aborde el tema de las enfermedades mentales y la dura problemática que tiene que afrontar la familia que cuenta con alguno de ellos entre sus miembros. Ese es el tema tratado en ‘El silencio de Elvis’, un montaje escrito y dirigido por Sandra Ferrús, que se viene representando en el Teatro Infanta Isabel desde finales de enero pasado, y hasta el próximo domingo.
Vicentín tiene ya cerca de 40 años y está diagnosticado como esquizofrénico paranoide. Es consciente de que, a veces, sus impulsos le llevan a hacer cosas que, en otro momento, no haría. Y le duele tanto saber que no puede reprimir esos impulsos, como las consecuencias personales y familiares que origina con ellos. Es un hombre alegre, bromista, divertido y le encanta acudir como concursante a todos los realities de la tele. Su familia, de clase modesta, está ya a punto de tirar la toalla por tantos y tan continuos episodios, pero la sanidad pública no le da una respuesta adecuada a su problemática. La violencia con la que, muchas veces, actúa Vicente puede llegar a provocar cualquier desgracia y, especialmente su madre, no puede sobrellevar esa pesada carga por mucho más tiempo. Habría que internarlo, pero la crisis económica que padece el país no facilita nada que estos enfermos puedan ser atendidos en centros especializados…
Protagonizada por Pepe Viyuela (Padre de Vicenç, que con su interpretación, da un verdadero recital de contención emocional, de carga dramática y cómica a la vez), Sandra Ferrús / Concha Delgado (Hermana), Elías González (Vicenç), Susana Hernández (la Madre), y Martxelo Rubio (Elvis), se ponen en la piel del enfermo mental, sus padres y hermana, y al mismo Elvis Presley, personaje con el que sueña frecuentemente Vicentín. Pero, además, desfilan también por el escenario personajes como un psiquiatra, una psicóloga, un forense médico, un compañero de la cárcel, una presentadora de televisión, un miembro del jurado del concurso…
Durante 90 minutos, con una sencilla escenografía que traslada al espectador desde el salón de casa, hasta la cárcel o un plató de televisión, el público ríe, sufre, se emociona, y empatiza con el joven con enfermedad mental y con sus padres y hermana, en los diferentes entornos donde tienen lugar los acontecimientos que los marcan, en un ejercicio que pone de manifiesto la falta de atención social que padecen estos enfermos y sus familias.
‘El silencio de Elvis’
Texto y dirección: Sandra Ferrús
Reparto: Pepe Viyuela, alternando en algunas funciones con José Luis Alcobendas, Sandra Ferrús, alternando en algunas funciones con Concha Delgado, Elías González, Susana Hernández y Martxelo Rubio
Diseño de escenografía: Fernando Bernués
Fotografía: Paula Piñón
Diseño iluminación y espacio sonoro: Acrónica Producciones
Diseño gráfico: Evaristo Sánchez
Ayudante de dirección: Aitor Merino
Asistente al montaje y coreografías: Concha Delgado
Producción ejecutiva: Susana Hernández
Teatro Infanta Isabel, Madrid
Hasta el 10 de marzo de 2019
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