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'Debate a 4' de TVE: Rivera y Casado fallaron en su intento de combatir juntos a Sánchez e Iglesias hace de 'poli bueno'
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(Foto: RTVE)

'Debate a 4' de TVE: Rivera y Casado fallaron en su intento de combatir juntos a Sánchez e Iglesias hace de 'poli bueno'

> Cataluña se come más de la mitad de un debate donde, de manera sorprendente, ni se mencionó a Venezuela
> Casado, el gran perdedor con argumentos muy poco convincentes y superado y sorprendido por el tono de Rivera
> Iglesias supo combinar ataques con manos tendidas a Sánchez y éste se lo agradeció con un frente común

lunes 22 de abril de 2019, 21:39h
No hubo ganadores ni vencidos... aunque Casado fue el que quedó más tocado en un debate donde Rivera tomó la iniciativa como principal candidato de la oposición contra Sánchez, quien mantuvo el pulso aunque los debates no son lo suyo. Pablo Iglesias se la jugó a la única carta de ser muy correcto y dar la mejor imagen en el plató, pero terminó apartado y fuera de la pelea. Quizás porque no era una pelea, sino un debate, y el de Podemos estaba cómodo en ese formato.

Sin embargo, sangre hubo: Rivera y Casado quisieron golpear al presidente socialista pero al final también intercambiándose golpes bajos, como boxeadores con un estilo controvertido. O como gallos, empeñados en saber quién era más fuerte contra Sánchez, descartando un frente común, a sabiendas que quieren pactar juntos un gobierno de coalición. Al final, Rivera ganó el pulso de los 'opositores' y Sánchez e Iglesias dejaron claro que es el único matrimonio posible para poder gobernar y al que más le salen las cuentas para ello.

El líder de Ciudadanos se negó a cualquier posibilidad de pactar con el PSOE, pero Sánchez fue muy claro a la hora de no cerrar ninguna puerta. En cuanto a los temas estelares, Cataluña tomó la gran parte del debate, lamentablemente, dejando el plano económico, fiscal, el empleo y otras preocupaciones de los españoles muy por debajo, algo que sólo aprovechó a tope Iglesias y Sánchez a medias.

Es una campaña ésta con el nacionalismo y la amenaza soberanista catalana como gran tema principal, y Rivera y Casado lo explotaron al máximo. Cada uno se la jugó a sus cartas, y es casi seguro que poco haya supuesto este debate para decantar votos entre los españoles.

Sobre pactos, Sánchez no recogió el guante y no aceptó en directo un pacto con Podemos, como le pidió Iglesias. Este último estuvo cómodo, porque nadie fue a por él, y el socialista salió más que airoso para tener a 2 rivales sólo destinados a atacarle.

Conclusiones: nadie ganó, pero Sánchez resistió, Iglesias convenció y Rivera se impuso a Casado como voz contestataria al Gobierno socialista.

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Así fue el debate en cada bloque:

> En los últimos minutos, los llamados 'minutos de oro', brilla Iglesias, pidiendo una oportunidad para demostrar su capacidad de cambiar las cosas a mejor, ofreciéndose a no pedir más el voto si defrauda a la gente. Rivera sólo se enfocó en el tema separatista: "¿Lo oyen? Es el silencio cómplice de Pedro Sánchez con los nacionalistas", dijo el líder de Ciudadanos. Sánchez insistió en las mismas ideas de la campaña: justicia social, un país diverso, igualitario, con convivencia y que avance frente a la amenaza de las derechas.

> Iglesias, en una esquina, quedaba muy descolgado de la bronca Rivera-Sánchez-Casado. "Yo te he preguntado Pedro", dijo Iglesias casi rogando al líder del PSOE, una confirmación sobre un pacto con su partido para poder gobernar a partir del 28 de abril. Hasta este momento, nulo protagonismo para el de Podemos: no se le ha reprochado nada ni se ha hablado de Venezuela. Todo un récord... Rivera aprovecha sus últimas palabras del bloque para insistir con Cataluña y el nacionalismo, sin proponer otra España más que en el tema territorial.

> Tras el bronco debate llegó el cuarto y último bloque: regeneración democrática y pactos postelectorales. Iglesias reconoció que la única posibilidad es un gobierno de coalición a tenor de las encuestas, pidiendo un pacto con el PSOE "a pesar de las desconfianzas". Casado no habla de regeneración y vuelve al debate de Cataluña y los traidores a la nación. Sánchez le afea esto y le recuerda que la primera moción de censura que ha triunfado en nuestro país ha sido contra el PP por un caso masivo de corrupción demostrado en los tribunales. Rivera le dio la razón en este punto pero le pidió dimitir en caso de sentencia condenatoria a los cargos del PSOE en el juicio del 'caso de los ERE' de Andalucía. Poco se acordaron de Vox, de hecho fue Sánchez el único que lo ha hecho en 2 ocasiones, ahora de nuevo para denunciar un futuro posible pacto con la ultraderecha para poder gobernar. Rivera reconoce que se "arrepiente mucho" de haber pactado con el PSOE en el pasado porque ahora ve cómo pacta con Torra. Rivera también sacudió a Casado y éste explotó: "Yo creo que nadie en su partido ni en el mío entiende estos ataques a mi persona".

> El tercer bloque en marcha: Política territorial. Rivera está haciéndose fuerte con las críticas a los guiños de Sánchez a los partidos catalanes para obtener su apoyo. Casado va siempre detrás de Rivera repitiendo argumentos. Iglesias se vuelve a remitir a la Constitución del 78, que hace años pedía renovar urgentemente. Defendió la nación de naciones y la diversidad, como también hizo el presidente Sánchez. Fue en uno de sus últimos turnos cuando sorprendió con el tono: "Yo me hice famoso por el no es no... ahora también adelanto que no es no, no va a haber independencia", recordó Sánchez sobre Cataluña. Rivera y Casado hacen frente común, tenso y bronco, contra Sánchez, que entra al trapo y les responde algo fuera de tono. Iglesias queda al margen y vuelve a ofrecer "debate sosegado", dando la cara como el candidato menos "radical", justo de lo que se le acusa. Sánchez recordó a Casado que el PP aprobó más de un centenar de iniciativas junto a Bildu en distintos lugares del País Vasco. También se habló del famoso indulto. Sánchez resistió bien los golpes y recordó que ambos rivales eran abogados y deberían conocer las leyes: ni se puede ofrecer un indulto antes de haber sentencia firme ni negarlo.

> Arranca el segundo bloque, sobre Política social, Estado del bienestar, pensiones e igualdad. El debate menos encorsetado resultó cuando Sánchez llamó "carca" a Rivera y su partido por las ideas sobre la maternidad subrogada, entre otras cosas, lo que incrementó la tensión. Iglesias volvió a combinar un frente común con Sánchez aunque reprochándole poca valentía en estos 10 meses en el Gobierno.

> Rivera sorprende con una última intervención muy crítica con el PP y nada con el PSOE: sacude al PP porque Casado también votó en el anterior gobierno, el de Rajoy, la subida generalizada de impuestos, como el IVA. Además, cuando ya nadie se lo esperaba, sacó una foto de Rodrigo Rato siendo detenido: "Éste es el milagro económico del PP", le sacudió, ante la mirada atónita de Casado.

> Comienza el debate del bloque económico y fiscal y empleo. Casado promete una "revolución fiscal" bajando impuestos en casi todos los ámbitos y tramos. Sánchez pide justicia social y recuerda que el PP hizo una amnistía fiscal a ricos y corruptos por decreto. Rivera pidió reformas profundas y menos guerras clásicas de argumentos entre "rojos y azules", en referencia al viejo bipartidismo. Iglesias volvió a estar muy convincente recordando problemas reales de los ciudadanos y citando la Constitución y su artículo 31 sobre la progresividad de los impuestos, que no se aplica. Rivera replica a Iglesias que lo que quiere Podemos es subir los impuestos a las clases medias: "Agárrense los bolsillos", explica.

> Casado, cuarto en el arranque, comenzó pegando duro con Cataluña y asegurando que Sánchez gobernará de nuevo, si puede, con los votos de los independentistas catalanes

> Sánchez, notablemente nervioso, está tenso y encorsetado en su primera intervención. Repite la idea de toda la campaña: progresar o anclarse en el pasado con las derechas

> Iglesias, muy contenido y educado, prefiere dejar la contienda para el debate posterior

> Rivera comenzó el debate y lo hizo a la gresca, criticando fuerte a Sánchez por evadir el debate en RTVE y también cuestionó a la dirección de esta casa, pidiendo la dimisión de Rosa María Mateo.

Vuelva a ver el debate:

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