www.diariocritico.com

ETA quebró la tregua

sábado 30 de diciembre de 2006, 17:10h

Podía suceder en cualquier momento, y finalmente se produjo las nueve de la mañana de este sábado, penúltimo día del año: La banda terrorista ETA terminaba de manera rotunda su tregua anunciada el 24 de marzo, y hacía probablemente  más difícil el pronóstico que sólo unas horas antes había expresado un eufórico presidente del Gobierno al hacer recuento de los hechos del año a punto de concluir, cuando expresaba  su confianza de que "en un año estaremos mejor que hoy", en relación a la banda ETA. La banda, más bien, daba la razón al socialista vasco Ramón Jáuregui que, pocas horas antes, había expresado en Bilbao sus sospechas y temores de que la banda pudiera estar preparando la ruptura de la tregua. Jáuregui, en esta ocasión, hacía su propio análisis, muy negativo, acerca de la muy controvertida aparición  de un zulo con explosivos de ETA en Amorebieta, Vizcaya, y relacionó este hecho con algunos otros indicios igualmente negativos: el robo de armas en Francia, la posible extorsión a empresarios o el recrudecimiento de la violencia callejera en localidades de Euskadi. Eran declaraciones del veterano socialista Jáuregui a Radio Euskadi, en las que también señalaba su opinión de que "en los próximos meses vamos a vivir una especie de pulso en el que desgraciadamente ETA se hace presente, sigue tutelando, está en el puesto de mando y no deja a la izquierda abertzale, Batasuna, que había reclamado un protagonismo para hacer un tránsito a la política".

 El lúcido análisis de Jáuregui, desafortunadamente, ha temido cumplimiento cuando, a las nueve de la mañana, saltaba por los aires un trozo del parking de la modernísima Terminal Cuatro de Barajas, previo aviso y advertencia de que nadie intentara evitar la explosión de los artefactos colocados.

De manera que ETA ha roto la tregua, y ha continuado el guión previsible: desde el PP y AVT se reclama que se rompa de inmediato y de forma contundente cualquier proceso de diálogo con la banda y sus secuaces batasunos, y desde las áreas más conciliadoras se reclama un "esperar y ver" que permita tener idea más cabal y completa sobre el momento en que estamos y qué pasos cabe suponer que se producirán a continuación. Hay un dato positivo, indudablemente, y es que los tres años sin atentados mortales no se han interrumpido, aunque sí la tregua de las explosiones y de los atentados, si bien esta parte de las actividades de la banda terrorista han tenido otro aspecto igualmente permanente y preocupante en la violencia callejera, que ha ido subiendo de tono y de desfachatez en las últimas semanas.

El año termina de mala manera en una materia que se las prometía muy felices. No es menos cierto que podía ser mucho peor, y en esa posibilidad cabe suponer que se situarán no pocas expectativas y cautas esperanzas.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios