IU bate el récord de austeridad en las dos semanas de campaña

Veamos. El PP ha calculado que los actos de Rajoy le saldrán a cada periodista por unos 11.000 euros, una cantidad que incluye desplazamientos en avión de línea regular y en clase turista, AVE, autocar - para distancias cortas- que pone el partido, y buenos hoteles. El candidato del PP viajará por casi toda España pero sin mezclarse con la prensa. Es más, en la mayoría de los casos, los periodistas o bien siguen la intervención del candidato a la Moncloa por circuito cerrado, en una sala alejada de donde se celebra el acto, o bien son instalados en un 'corralito' dentro del recinto del mitin a muchos metros del escenario desde el que Rajoy y el resto de los dirigentes populares lanzan sus arengas. El contacto con los periodistas que le siguen en campaña es mínimo, por no decir nulo.

Un ejemplo del 'mal trato' a la prensa es lo que ocurrió el pasado lunes, 31 de octubre, la víspera del día de Todos los Santos, fecha en la que Rajoy presentó el Programa Electoral en Santiago de Compostela. Muchos de los periodistas que le siguen se vieron obligados a hacer noche allí el domingo para poder estar a las diez de la mañana en el acto del candidato del PP. El chasco fue que nada más acabar la intervención de Rajoy ante la Junta Directiva Nacional, que los periodistas siguieron por televisión en una sala aislada, todos los dirigentes del PP salieron pitando para disfrutar de lo que quedaba de 'puente'. Nadie pidió la palabra para comentar 'algo' del programa. Para colmo, el avión que traía a la prensa de nuevo a Madrid sufrió un buen retraso. El enfado era generalizado.

@conRubalcaba, más caro aún

¿Y en el PSOE?. Pues para empezar el presupuesto programado para los medios de comunicación en esta campaña se ha disparado hasta alcanzar los 15.000 euros por 'barba'. Es decir, a cada periodista le sale por unos mil euros diarios. Viajes en avión en línea regular y clase turista, AVE, autocar del partido para ciertos desplazamientos y buenos hoteles. Y eso que estamos en épocas de 'vacas flacas'. Rubalcaba también viaja por su cuenta y aunque ofrece de vez en cuando ruedas de prensa y los periodistas pueden charlar con él en algunos actos poco multitudinarios - como el celebrado este viernes en Ferraz en el que agradeció el trabajo de los voluntarios-, sus intervenciones también son seguidas a muchos metros del escenario, en 'corralitos' habilitados para la prensa. Pero lo que más llama la atención del itinerario del aspirante del PSOE es que de los quince días de la campaña hay siete noches que se pernocta en Madrid, lo que teóricamente no supone ningún gasto de hotel para los periodistas.

IU: más barato, imposible

Llegados a este punto y visto lo anterior, también cuesta creer que IU haya presupuestado los gastos de la campaña para seguir a Cayo Lara, en ¡menos de 2.000 euros!. Pero asi es. ¿Cómo puede ser posible esta diferencia tan abismal de precios? Pues apretándose mucho el cinturón, por lo que se ve. Para empezar, la prensa que sigue los actos de Lara, aunque viajará hasta algunas provincias en avión, utilizará mucho más el autocar contratado por el partido y el tren 'convencional'. Además, los hoteles elegidos, sin desmerecer en absoluto, son de tres estrellas con algunas excepciones de cuatro. Bien es verdad que hay varios actos en localidades de Madrid o en la misma capital, al ser la circunscripción en que la coalición podría tener en estas elecciones una importante subida, logrando tres e incluso cuatro diputados. A ello habría que añadir otro dato: que Lara no hará tantos 'dobletes' -e incluso 'tripletes'- como van a hacer Rajoy y Rubalcaba por España.

Pero a diferencia de sus 'colegas' del PP y del PSOE, Cayo Lara tiene previstas cuatro ruedas de prensa en campaña, en Zaragoza, Pamplona, Málaga y Sevilla, para hablar de temas de actualidad. Además, el candidato de IU va compartir autobús y almuerzo con los periodistas alguno de los días de la campaña - como han hecho siempre, todo hay que decirlo, sus antecesores-. Y otro detalle, en los mítines, la prensa se sienta lo más cerca posible del escenario, junto al público, para no perder comba de lo que se cuece entre 'bambalinas'.

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