Rajoy conseguirá un espaldarazo de Obama a sus reformas económicas en su primera visita a la Casa Blanca

La situación económica en España y EEUU y sus perspectivas de futuro será uno de los asuntos que dominen la entrevista de una hora que ambos mantendrán el día 13 en Washington. Obama, según las mismas fuentes, confirmará que las medidas implantadas por el Ejecutivo español para hacer frente a la crisis van "en el buen camino".

La visita de Rajoy a la Casa Blanca supondrá por tanto un fuerte espaldarazo a los esfuerzos de nuestro país por recuperar la confianza de los mercados e inversores y contribuirá a extender la idea de que España ha iniciado ya un cambio de tendencia.

Rajoy, que llegará en la tarde del domingo a la capital norteamericana, aprovechará su estancia de dos días en Washington para reunirse con la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, y para pronunciar una conferencia, seguida de un coloquio, en la US Chamber of Commerce, la mayor del mundo, ante la que presentará España como un país que está "volviendo al crecimiento", han informado fuentes del Ejecutivo español.

A la conferencia asistirán destacados empresarios españoles con intereses en EEUU, como los presidentes de Telefónica, César Alierta; La Caixa, Isidro Fainé; Iberdrola, José Ignacio Sánchez Galán, y Abertis, Francisco Reynés, con los que Rajoy tendrá oportunidad de reunirse después, ya que celebrarán el martes por la tarde en Washington una reunión del Consejo Español de Competitividad.

Agenda sin su mujer Elvira

Rajoy, a quien no acompañará en este viaje su mujer, Elvira Rodríguez, llegará a Washington a última hora de la tarde del domingo. Su agenda arrancará el lunes por la mañana con una visita protocolaria al cementerio de Arlington, donde están enterrados los veteranos de guerra, pero también el presidente John F. Kennedy.

A las 14.15 horas está programada la entrevista con Obama en el Despacho Oval, que irá seguida de unas breves declaraciones de ambos ante la prensa. Los gabinetes de ambos han cerrado una serie de temas sobre los que discurrirá la conversación, aunque cada parte es libre de introducir otras cuestiones que tenga interés de suscitar.

Junto a la marcha de las economías española y estadounidense, se hablará del inicio de las negociaciones del acuerdo de Comercio e Inversiones entre España y EEUU. España es una firme defensora de este acuerdo, por los beneficios que podría suponer para empresas de los sectores de la automoción o la construcción, por citar algunos, y hará especial énfasis en los aspectos relacionadas con la "liberalización de servicios", según fuentes españolas.

Los dos presidentes harán también un repaso de la relación bilateral, con especial detenimiento en la cooperación en materia de Defensa, uno de los aspectos que más interesa a EEUU de su relación con España. Los americanos desplegaron el año pasado en la base de Morón una fuerza de despliegue rápido en el Sahel de 500 marines. En principio su presencia era por un año, hasta que encontraran una base mejor en Africa, pero es probable que soliciten una prórroga, pues la autorización que tienen expira en abril de este año.

También se ha reservado en la agenda de la conversación entre los presidentes un último capítulo dedicado a los "intereses comunes en América Latina", entre ellos la reciente constituida Alianza del Pacífico entre México, Perú, Chile y Colombia.

La cuestión catalana no figura en la agenda y por parte española no hay interés alguno en ponerlo sobre la mesa.

Desde la Casa Blanca Rajoy se trasladará a la sede del Fondo Monetario Internacional (FMI), donde se reunirá con Lagarde. Al término de este encuentro impondrá la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica al presidente de la Cámara de Exteriores del Senado, Bob Menéndez, expresidente del USA Spain Council, foro encargado de acercar a las sociedades civiles de ambos países. Con Menéndez coincidirá también el martes, ya que Rajoy visitará en el Senado a los miembros de este Comité de Exteriores.

El presidente completará su agenda con una entrevista con el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza.