Una auténtica bajada de bragas

Anda que me equivoqué bastante. En mi anterior artículo, titulado "Perdonen que no me lo crea", escrito la misma tarde en que la gran Susana Diaz desautorizó a su consejera de Fomento, Elena Cortés retirándole las competencias en Vivienda por lo de la Corrala Utopía y abriendo el melón de la crisis de Gobierno, reiteraba que no acaba de creerme que PSOE-A e IULV-CA rompiesen relaciones y acuerdos de legislatura porque no le interesaba a ninguno de ellos. Muchos analistas políticos de más allá de Despeñaperros, enamorados como están de la gran estrella emergente socialista, se deshicieron en elogios sobre el golpe de efecto dado por Susana (llegaron a decir que la presidenta había puesto "los ovarios sobre la mesa") para restablecer la "legalidad". Pero casi todos ellos, cegados por el deslumbrante oropel que rodea a la presidenta andaluza, han confundido el culo con las témporas o, mejor dicho, el deseo con la realidad. 


Ha bastado simplemente con que el coordinador general de IULV-CA, Antonio Maíllo, amenazara a los negociadores socialistas, entre los que se encontraba, cómo no, el gran Mario Jiménez, con romper la baraja, los acurrdos firmados por el bipartito y retirarle su apoyo parlamentario, para que a éstos les entrara el acojono y se acordaran de lo que está ocurriendo en la cercana Extremadura. Lagarto, lagarto. Así que hubo bajada de pantalones, es decir que Susana se bajó las bragas que para el caso es lo mismo y donde dije digo, digo Diego...Valderas. Vuelta a escribir en el BOJA la devolución de las competencias a su titular Cortés y aquí paz y después gloria. Lo que hemos comprobado explicitamente es que, por esta vez y sin que sirva de precedente, "lo Cortés si que quita lo valiente"


En el fondo no ha ocurrido nada extraño para los que llevamos conociendo la trayectoria política de Susana Díaz desde hace años. Lo he reiterado en más de una ocasión. Lo de la presidenta andaluza y secretaria general del PSOE-A es puro márketing, fachada, mera imagen, eso sí vendida al estilo americano como la Coca-Cola. Susana es "la chispa del PSOE" tamizada por el arte de Triana. Todo lo contrario a su jefe Alfredo Pérez Rubalcaba que es mas de la sidra asturiana. Susana se queda en mera burbuja azucarada, ligth o cero-cero. Cada vez que oigo a los habituales tertulianos echarle flores a Susana Díaz por ésta o aquella intervención en algún cenáculo.madrileño, me quedo a cuadros.Los politicos no deberían medirse por sus dichos, que también, sino sobre todo por sus hechos. Los dichos de Susana en el hotel Ritz, en los mítines, en Barcelona con Arturo Mas, en los congresos y conferencias politicas, llaman mucho la atención porque se salen del habitual guión de la monotonía partidista al uso de sus compañeros de partido.. 


Susana critica la política llevada a cabo por Rodríguez Zapatero, pero cuando se topa con él le da un abrazo y se autotitula heredera de su gestión; Susana pone a caldo a Mas en Madrid, pero en Barcelona no dice nada contra el desafío independentista catalán; Susana asegura que va a combatir la corrupción y devolverle a los andaluces el dinero de los EREs fraudulentos pero aquí seguimos viendo que la única que está tomando decisiones no es Susana Díaz, sino Mercedes Alaya; Susana recibe con una sonrisa al nuevo presidente del PP andaluz, Juanma Moreno, en el Palacio de San Telmo, pero  ni tan siquiera se lee el decálogo de medidas a pactar para relanzar la economía propuesto por el lider popular...Y así podríamos seguir hasta el infinito en los seis meses que lleva como presidenta de la Junta de Andalucía. Todo teatro, puro teatro, que cantaba La Lupe: "Teatro, lo tuyo es puro teatro, falseddad bien ensayada, estudiado simulacro".


En fin, que toda esta supuesta crisis de autoridad y honestidad entre los socios de Gobierno en Andalucía ha sido un paripé, un pulso controlado que sólo ha servido para comprobar que los socialistas necesitan a los comunistas como los comunistas a los socialistas para seguir manejando entre ambos las riendas del cortijo andaluz.