TVE le echa valor en Cataluña: graba y emitirá un programa taurino sobre la vida de Juan Belmonte

Guste o no guste, los toros son cultura, incluso en TVE. Así que, como nos informa nuestro corresponsal cultural en la Cataluña teóricamente antitaurina, José Rafael Palomar, la tele ha echado la 'pata p'alante'. Y es que todos los sábados a las ocho de la tarde se emite un interesante programa cultural en la 2 de TVE: "La mitad invisible", dirigido por Blanca Flaquer, y que presenta el popular comunicador Juan Carlos Ortega. Uno de los programas versa acerca del espectáculo "Belmonte", que se representó en 1.988 en el Mercat de las Flors de Barcelona, con la compañía del prestigioso bailarín Cesc Gelabert , la coreografía de Lidia Azzopardi y música del castellonense Carles Santos. 

En 2.011 volvió a verse, en esta ocasión en el Lliure, con motivo de los 25 años de la primera representación. Al ser un espectáculo centrado en una figura histórica de la tauromaquia, al presentador del programa se le ocurrió acudir a grabar a la finca de la ganadera Ángela Mur, enclavada en tierras del Ebro. Allí Ortega charló con el director de la Escuela de Tauromaquia de Cataluña Manuel Salmerón y con el profesor Fernando Gracia. Éste le explicó las claves del difícil arte del toreo, y aquél le habló de la figura de Juan Belmonte.  Y uno de los alumnos más aventajados de la escuela, Antoni Arrebola, lidió unos novillos. 

Insultos en Facebook

Sin embargo, el principal aliciente de la grabación fue que el presentador Ortega salió al ruedo de la placita que tiene la ganadería, y se fajó por vez primera en su vida con varios becerros. Según los que lo vieron, dio muestras de auténtico valor. El presentador, que en sus intervenciones radiofónicas ("No es un día cualquiera" y "La noche en vela" en RNE) da siempre sus pinceladas de humor, confesó haber pasado nervios, pero no miedo: "Supongo que por la adrenalina. Es una sensación indescriptible"

Eso sí, el asunto ha tenido unas connotaciones negativas para el 'torero' Ortega, porque puso en su Facebook las fotos donde aparecía toreando, y le llegaron todo tipo de improperios e insultos de los militantes anónimos del animalismo. Hasta el punto de que el presentador del programa se ha visto obligado a borrar algunos de los amigos (o conocidos) que tenía en la red... Por valiente.