A poco más de dos días para el cierre de campaña, el PP no sabe, mejor dicho dice no saber, dónde tendrá lugar el acto central de los populares, el mitin de Madrid con Esperanza Aguirre, Cristina Cifuentes y Mariano Rajoy. Oficialmente no se da ninguna razón para esta presunta e imposible falta de previsión, extraoficialmente se aducen motivos de seguridad. El miedo a un escrache es real después de los incidentes en la reciente visita del presidente del Gobierno a Barcelona en apoyo de Alberto Fernández, candidato al Ayuntamiento, y mejor no dar pistas.
El lunes en Barcelona no preocupó el escrache silencioso de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) con que fue recibido Rajoy a las puertas del lugar elegido para el mitin, sino que tres activistas lograran infiltrarse entre el público de fieles militantes populares e interrumpieran otras tantas veces el discurso del presidente. Lo último que quiere el PP es que en el cierre de campaña de este viernes se repita la escena y se convierta en el titular de los medios de comunicación.
El acoso que sufren otros candidatos del PP, como por ejemplo
Rita Barberá en Valencia, apunta a un incremento de la tensión en las horas finales de una campaña que día a día se vuelve más bronca. De hecho, las Fuerzas de Seguridad han incrementado notablemente la vigilancia de las redes sociales a la búsqueda de cualquier indicio de intentos de boicot de los diversos candidatos. Las candidatas 'populares' al Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid,
Esperanza Aguirre y
Cristina Cifuentes, también 'sufrieron' en sus propias carnes un escrache de la plataforma 'Stop Desahucios' en un mitin en el barrio madrileño de Villaverde.
La comunicación y la previsión han brillado por su ausencia en esta campaña, y es que no sólo el PP 'se hace el duro' con la información que transmite a los periodistas y esto es algo que comparten la mayoría de partidos, tanto 'viejos' como 'nuevos'. El nerviosismo latente en las sedes de los partidos provoca situaciones de desconcierto y desinformación, y es que hacía mucho tiempo que unas urnas despertaban tanto interés, así como hipótesis y 'quinielas' sobre lo que pasará después de este domingo 24 de mayo.
Aunque los nervios afecten a todos los combatientes en esta contienda electoral, es cierto que, tanto PSOE, como Podemos y Ciudadanos ya han difundido los lugares en los que los líderes apoyarán por última vez a sus candidatos municipales y autonómicos. Este viernes, Rajoy, Rivera, Sánchez e Iglesias confluirán en Madrid, aunque cada cual en su 'punto estratégico', ya saben lo que dicen: 'juntos pero no revueltos'.
Sánchez citará a sus 'fieles' en el parque de Berlín, Iglesias ha elegido la explanada del Puente del Rey en la zona de Madrid Río, y Rivera, que prefiere un lugar cerrado, pronunciará su arenga en el hotel Rafael Atocha.
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