Ha ocurrido en la segunda parte del acto, cuando el mapping ha repasado algunos pasajes de la historia de Cataluña, como la Guerra de Sucesión con la caída de Barcelona en 1714, la Guerra Civil, la Edad Media y la industrialización, y la última imagen ha sido la de una multitud rompiendo un muro bajo la leyenda '2015'.
Antes del mapping, la primera fase del acto ha sido un espectáculo teatral que ha revindicado la lengua y la cultura como factores esenciales de la identidad catalana, y que demuestran la vocación de Cataluña de "pertenecer vocacionalmente a Europa por filiación directa".
Durante el espectáculo se ha homenajeado el centenario de la Mancomunitat de Cataluña, el "embrión del autogobierno catalán tras dos siglos", y se ha recordado que fue clave para la creación de la red de bibliotecas populares, primera piedra de la actual red de bibliotecas públicas.
Durante esta parte del acto se han leído unas palabras del general Eliseo Álvarez, jefe de los Servicios de Ocupación, en las que el 27 de enero de de 1939 apelaba a la unidad de España y citaba la voluntad del Franco sobre Cataluña "de respetar en ella todo lo auténtico e íntimo de su ser que no aliente pretensiones separatistas".
La relación de la Guerra Civil con las bibliotecas es que, por ejemplo, la de Vic (Barcelona) estuvo cerrada siete meses tras la llegada de las tropas franquistas, que sometieron a "revisión" la bibliotecas populares que había alumbrado la Mancomunitat.
El acto ha contado con los actores Pep Cruz, Mercè Pons, Rosa Renom, Sílvia Bel, Vicky Peña y Mercè Pons, y con las interpretaciones de la Banda Municipal de Barcelona, la Colla Sardanista Mare Nostrum, el Orfeó Català, la cantante Alba Carmona y el guitarrista Toti Soler.
También han bailado para la ocasión Cesc Gelabert, Bebeto y Marina Cidra, Xavier Bagà y Glòria Gella, y se ha cantado 'El cant de la senyera' y 'Els segadors', en un acto que ha durado poco más de una hora y en que se han oído gritos de 'Independència' de los ciudadanos que se han acercado a la plaza.
Por primera vez desde que se celebra, el acto institucional se ha trasladado a la plaza Sant Jaume; lo ha presidido el jefe del Ejecutivo catalán, Artur Mas, y la presidenta del Parlament, Núria de Gispert, y han asistido representantes de todas las formaciones políticas salvo el PP, C's y la CUP.
La parte central de la plaza, inaccesible para el público, ha sido ocupada por unos 500 invitados, mientras que los ciudadanos que lo han querido han podido seguir el acto desde los laterales y detrás de una vallas colocadas para la ocasión.
También ha supuesto una novedad que se haya celebrado el 9 de septiembre y no el 11, y el Govern ha decidido que sea así porque este año la Diada será el primer día de campaña de las elecciones catalanas, y no quería situar el acto institucional ese día.
Entre los asistentes han estado el expresidente de la Generalitat José Montilla; los consellers del Govern; la exvicepresidenta Joana Ortega, que se ha sentado junto a su sucesora, Neus Munté; y varios diputados, como Joan Herrera (ICV-EUiA), Marta Rovira (ERC), Maurici Lucena (PSC), Jordi Turull (CDC) y Roger Montañola (Unió). También ha asistido la alcaldesa del Barcelona, Ada Colau; sus cuatro tenientes de alcalde; el comisario jefe de Mossos, Josep Lluís Trapero; la expresidenta de Òmnium, Muriel Casals; el presidente del Institut d'Estudis Catalans, Joandomènec Ros, y el escritor Albert Sánchez-Piñol.
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