Indignante el caso de la puerta giratoria europea más polémica hasta el momento: quien fuera el presidente de la Comisión Europea durante 10 años, el portugués José Manuel Durão Barroso, va a fichar por el banco Goldman Sachs, señalado como uno de los culpables del estallido de la crisis económica internacional. Lo peor es que como ex presidente de Bruselas, Durao sigue cobrando al mes 18.000 euros en concepto de pensión.
Por todo ello, el Gobierno francés ha sido el primero en estallar y ha tachado de "escándalosa" la incorporación de Durao Barroso a la empresa Goldman Sachs Internacional y le ha instado a replantearse este nuevo trabajo.
El responsable de Asuntos Europeos en el Ministerio de Exteriores galo, Harlem Desir, ha reconocido ante la Asamblea Nacional que el fichaje de Barroso genera dudas sobre posibles conflictos de interés y ha llamado a endurecer la regulación sobre 'puertas giratorias' para antiguos dirigentes europeos.
"Es un error por parte del señor Barroso y el más flaco favor que un expresidente de la Comisión puede hacer por el proyecto europeo, en un momento de la historia en la que hay que apoyarlo y reforzarlo", ha advertido Desir en una sesión parlamentaria.
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