Puigdemont se queda solo tras proponer la salida de Cataluña de la Unión Europea, antes idealizada

El ex president se ha cubierto de gloria. Carles Puigdemont sugirió en una entrevista que Cataluña celebre un referéndum sobre su permanencia en la Unión Europea. Todo un hecho surrealista teniendo en cuenta que el número uno de la lista de Junts per Catalunya forma parte del partido PDeCAT, cuyas siglas responden a "Partido Democrático Europeo de Cataluña".

Puigdemont lo sugirió en la entrevista concedida a la televisión pública israelí que ya les resumimos nosotros ayer, en la que definió a la UE como "un club de países decadentes, obsolescentes, en el que mandan unos pocos, además muy ligados a intereses económicos cada vez más discutibles".

También añadió que quizás muchos catalanes no quieren formar parte de un organismo "insensible al atropello de los derechos humanos y democráticos de una parte del territorio solo porque una derecha postfranquista tenga interés en que sea así". A pesar de todo, el expresidente catalán aseguró que es partidario de la UE y del euro, aunque señaló que trabajará "para cambiarla".

En la misma entrevista, Puigdemont también se refirió a los comicios del 21 de diciembre: "Si gano las elecciones y soy investido presidente, lo que me habría llevado a ganar las elecciones es lo que me puede llevar a prisión".

En cuanto a la declaración unilateral de independencia aprobada por el Parlament de Cataluña el 27 de octubre, apuntó que "no había otra opción", aunque admitió que "no es la única solución". Preguntado sobre la reacción del Gobierno, aseguró que le consta "la voluntad del Estado de usar la violencia para evitar la independencia", así como la existencia de planes para "ocupar con la fuerza policial las instituciones catalanas". En cuanto a la fuga de empresas de Cataluña, llamó a "desdramatizar" la "estrategia política del miedo económico", y advirtió de que las consecuencias económicas pueden afectar a toda España y a Europa.

Partidos y empresarios rechazan la propuesta de Puigdemont

Las declaraciones de Puigdemont han recibido un alud de críticas por parte de los partidos de la oposición catalana y también desde sectores económicos, según destaca LA VANGUARDIA. El primero en reaccionar fue el candidato del PP a la presidencia de la Generalitat, Xavier García Albiol, que en un mitin de precampaña celebrado en Vallfogona de Balaguer (Lérida) acusó a Puigdemont de querer "convertir a Cataluña en una isla al margen de la realidad".

En el mismo acto, la secretaria general del PP y ministra Defensa, María Dolores de Cospedal, recriminó al "fugado" expresidente de la Generalitat que con sus propuestas ponga en peligro las ayudas europeas que reciben miles de agricultores y ganaderos catalanes.

El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, que acudió a Barcelona para apoyar a la candidata de su partido a la Generalitat, Inés Arrimadas, equiparó a Puigdemont con Marine Le Pen, líder del ultraderechista y euroescéptico Frente Nacional francés. "Por fin se le ha caído la careta: es el populismo de toda la vida, que siempre ha querido destruir Europa. Esto demuestra que la batalla de Cataluña es también la batalla de Europa", afirmó.

La portavoz de la campaña electoral del PSC, Eva Granados, señaló que la propuesta de Puigdemont "es una idea que está fuera de lugar y que transmite una imagen pésima". "Necesitamos estabilidad y no más aventuras", subrayó.

En opinión del candidato de Catalunya en Comú Podem a la presidencia de la Generalitat, Xavier Domènech, "pasar de la euroaceptación absoluta de la austeridad al euroescepticismo es un paso más que demuestra la falta de proyecto de país del PDeCAT y de Puigdemont".