El presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, advirtió ayer al jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, de que a su partido "se le agota" la paciencia, como le está ocurriendo a más del 80% de los españoles, y tiene que cumplir con el pacto de investidura si quiere mantener la estabilidad. "Sería absurdo que por una cuestión personal o partidista ponga en jaque la estabilidad de España", subrayó Rivera durante su intervención ante el grupo parlamentario.
En su opinión, el enfrentamiento entre la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, sus antecesores en el cargo Ignacio González y Esperanza Aguirre y el ex consejero madrileño Francisco Granados a cuenta de la corrupción es "impropio de un partido de gobierno".
Rivera acusó a Rajoy de incumplir el pacto de investidura que firmó con Ciudadanos en los apartados relativos a la reforma electoral, la eliminación de aforamientos políticos o la renuncia al cargo público de quienes están investigados por corrupción política. En este punto, mencionó que sigue pendiente el cese de la senadora Pilar Barrerio, imputada en la trama de corrupción Púnica.
Posteriormente, en los pasillos del Congreso, Rivera dijo que si Rajoy "tiene palabra" el pacto de investidura con su partido seguirá vigente, pero que "si miente a los españoles", este acuerdo no continuará.
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, apeló a la responsabilidad de Ciudadanos para mantener la estabilidad del país al entender que es la manera de "afianzar" la recuperación. Ante las reiteradas advertencias de Ciudadanos al Ejecutivo de que los incumplimientos del pacto de investidura pueden afectar a la legislatura, la vicepresidenta recordó que se ha tardado un año en formar gobierno y sólo llevan otro trabajando, e insistió en que el Gobierno está comprometido a cumplir los acuerdos.