Villarejo, 'enviado' del Estado para resolver los problemas entre el rey Juan Carlos y Corinna

El comisario jubilado José Manuel Villarejo ha eludido responder a las preguntas más comprometedoras sobre las conocidas como 'cintas de Corinna' y se ha limitado a decir que fue un 'enviado' del Estado para resolver los problemas entre el rey Juan Carlos I y la princesa Corinna zu Sayn-Wittgenstein. Las grabaciones que vieron la luz hace dos semanas contienen la conversación entre Corinna y Villarejo durante la reunión que mantuvieron en un hotel de Londres en 2015.

Corinna reveló entonces al comisario José Manuel Villarejo que Juan Carlos I la usaba como testaferro para evadir impuestos, y aseguró que el rey había creado cuentas en Suiza a nombre de su primo Álvaro Orleans de Borbón, y que su abogado Dante Canónica se encargaba de crear las estructuras opacas con "regalos envenenados" que luego reclamaba. Villarejo no ha aclarado si fue él quien grabó esa conversación con Corinna, y ha insistido en que trabajaba para el Estado.

Villarejo solo ha respondido a las preguntas del juez De Egea y su abogado, pero ha rechazado responder a las preguntas de la Fiscalía Anticorrupción, y había solicitado comparecer por videoconferencia desde la cárcel de Estremera alegando una dolencia en la espalda, pero el juez ha desestimado su petición.

El ex comisario se encuentra en la cárcel desde noviembre de 2017 por el 'caso Tándem', una presunta trama de corrupción en la que habrían participado varios policías y en la que el comisario está investigado por blanqueo de capitales, cohecho y organización criminal. Una de las piezas del caso, la de las 'cintas de Corinna' se abrió a raíz de la difusión de las grabaciones en 'El Español' y 'Ok diario'.