Ayer en los mercados financieros la clave fue el nuevo Acuerdo Estados Unidos-México-Canadá (United States-Mexico-Canada Agreement (USMCA) en inglés). Después de que los negociadores aceleraran sus trabajos de forma frenética antes del plazo de medianoche impuesto por Estados Unidos, el domingo se anunciaba el nuevo acuerdo que sustituye al Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Los mercados bursátiles en los tres países lo celebraron, lo mismo que el dólar canadiense y el peso mexicano. El USMCA supone 1,2 billones de dólares en comercio entre los tres países. Aunque los cambios no son demasiado profundos respecto al TLCAN, la lectura de todas las partes implicadas y del mercado, lógicamente, es positiva, en la medida en que evita una guerra comercial en ese hemisferio. Ahora, toda la atención quedará centrada en el riesgo de una guerra comercial de Estados Unidos con China. Ayer, la Directora Gerente del FMI, en un discurso antes de las reuniones anuales del FMI y el Banco Mundial la próxima semana en Indonesia, afirmaba que el crecimiento estaba en su nivel más alto desde 2011, pero que se había estancado, con menos países ayudando a su expansión. “La guerra comercial, junto con la subida de los tipos de interés y el fortalecimiento del dólar, está empezando a afectar a los mercados emergentes… Hablando claro, no estamos viendo un contagio financiero generalizado -hasta ahora-, pero también sabemos que las condiciones pueden cambiar rápidamente. Si las disputas comerciales actuales se intensificaran, podrían causar un impacto en un rango más amplio de economías emergentes y en desarrollo", apuntó la responsable del FMI.