Mucho se ha estado hablando del efecto económico que tendrían los Presupuestos Generales del Gobierno socialista y Unidos Podemos en caso de salir adelante, sobre todo por la subida de impuestos y la del salario mínimo a 900 euros. Pero pocos se han sentado a analizar cuál ha sido el efecto real en la economía en estos más de 4 meses que lleva la administración Sánchez en el poder.
Si bien ayer mismo el Gobierno rebajaba una décima el pronóstico de crecimiento para este año y el siguiente, hasta el 2,6% y el 2,3%, respectivamente, este martes el instituto BBVA Research confirmaba esta cifra para 2018 aunque se atreve a proyectar un 2,4% para el año que viene. Ahora bien, ¿qué pasa con las empresas y los inversionistas en los mercados financieros?
Pues bien, las cifras son las que son y están muy claras: cuando Pedro Sánchez y el PSOE comenzaron a hablar de una moción de censura contra Mariano Rajoy, a finales de mayo, la Bolsa española cotizaba con números mucho más altos. El selectivo de los mejores valores, el Ibex 35, el gran indicador de la salud financiera de nuestras mejores empresas, cotizaba a 10.000 puntos, pero desde el anuncio de la moción se desplomó hasta los 9.500, el día 30 de mayo. Después, tras ser investido presidente Sánchez, las aguas se calmaron.
De hecho, en junio la Bolsa superó el sobresalto político y llegó a recuperar casi los 10.000 puntos de la era Rajoy para llegar a los 9.957 puntos, a mediados de mes. Pero las posteriores decisiones económicas y las interferencias internacionales han golpeado a España hasta ver al Ibex en preocupantes cifras. El pasado día 12, curiosamente día de la Fiesta Nacional, se llegó al mínimo de su valor en mucho tiempo, 8.902 puntos. Así, en cifras globales, la bolsa española la caído más de un 10% desde que llegara Sánchez, una peligrosa cifra para los mercados.
Un poco de contexto
Tras superar los peores años de la crisis, el Ibex 35 dejaba el año 2016 en 9.352 puntos y cerraba 2017 sobre los 10.000. Durante este 2018 el gráfico se movió pero siempre estuvo ronfando esa cota, algo que se ha hundido en los últimos meses. "La incertidumbre nunca es buena para la bolsa", repiten como un mantra los expertos en mercados, que ven cómo se cumplen los malos augurios, que si bien en junio no eran muy pesimistas, ahora sí van tomando este aspecto.
El anuncio de subida de impuestos para las grandes empresas, aunque ya no haya 'amenaza' de impuesto para la banca, pero sí para el futuro de las Socimi, las Sicav... también preocupa el impuesto o tasa del 0,2% por las operaciones de compra de acciones españolas cuya capitalización bursátil sea superior a 1.000 millones. Todo ello, incluido en el proyecto de Presupuestos, ha hecho tamblar más si cabe a la bolsa española.
Ya en septiembre se calculó en 11.000 millones la fuga de inversiones en el Ibex desde la llegada de Sánchez, cuando la capitalización total del Ibex pasó de los 487.679 millones de euros de mayo a los 476.492 en septiembre. Sin embargo, se estima que en este mes de octubre la cifra se recuperaría y la inversión total en bolsa podría incluso llegar a los 500.000 millones. Viendo el gráfico, la realidad es que no hay un claro desplome ocasionado por la llegada del PSOE al Gobierno, sino una serie de circunstancias y condicionantes externos que también están golpeando a las bolsas internacionales.
Mercados internacionales
El FTSE 100, índice de referencia de la Bolsa de Londres, también ha perdido mucho desde finales de mayo (pasa de 7.800 a los actuales 7.000), con lo que también ha caído más de un 10%, como la bolsa española. El CAC 40 francés dejó mayo con 5.300 puntos y ahora vale 5.000, cerca de un -6%. Por su parte, el DAX alemán comenzaba junio en 12.700 puntos y ahora cotiza a 11.500, un -10%.
Una tónica europea que no golpea a Estados Unidos, beneficiado en los mercados por su mejoría macroeconómica y la guerra de aranceles iniciada por Donald Trump. El Dow Jones, el índice general de Wall Street, sube. Por tomar la misma referencia temporal, la llegada de Pedro Sánchez al poder en España, el Dow Jones cotizaba a 24.600 puntos ese día, mientras que ahora llega a 25.200, y eso que ha pasado una mala semana tras haber llegado a máximos de 26.800. En total, ha subido aproximadamente un 2%.
En las bolsas asiáticas también están de buena cara. El prestigioso Nikkei japonés ha ganado en estos meses un ligero 1%, aunque ha llegado a crecer más de un 3% hasta que llegaron las últimas turbulencias, las mismas que está atravesando, por supuesto, la bolsa española.
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