Maduro, ante el ultimátum, sólo cede en repetir elecciones parlamentarias, no las presidenciales

El presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha considerado este miércoles que sería "muy bueno" un adelanto de las elecciones a la Asamblea Nacional, controlada actualmente por la oposión, pero ha descartado tajantemente elecciones presidenciales antes de 2025.

Un ofrecimiento a desatascar la crisis que ha parecido insuficiente a todos los frentes, sobre todo a la oposición venezolana, pero también en el ámbito internacional. Se exige que Maduro se vuelva a someter a las urnas personalmente, y en unos comicios medidos por lupa.

"No aceptamos el ultimátum ni el chantaje de nadie en el mundo. En Venezuela hubo un resultado y si el imperialismo quiere nuevas elecciones que espere para el 2025", explicó a una agencia de prensa rusa, Ria Novosti. Cree que se rechaza reconocer su victoria electoral y que es un "un despropósito del grupo de países alineados como satélites a la política de Donald Trump".

"No reconozco tus elecciones, las repites... ¿Pero quiénes son ellos para dictaminar eso aquí?", denunció Maduro. Dice que le eligió como presidente el 68% el pueblo de Venezuela, que eliminando la abstención, suponía el 32% de los votos posibles, asegurando que eso es mucho más de lo que obtienen muchos presidentes y mandatarios europeos, sin citar a Pedro Sánchez, por ejemplo. "Sería muy bueno que hubiera elecciones adelantadas para el Parlamento venezolano, sería una buena forma de debate político y una solución con el voto popular", ofrecio tan sólo.