A lo largo del último año unos juguetes eróticos han estado en boca de todos. Nos referimos a los succionadores de clítoris, los cuales han adquirido una gran popularidad. Se trata de un producto que le traslada a la mujer una sensación parecida a la de recibir sexo oral, con la ventaja de que solo se interrumpe cuando ella lo desea.
En próximas líneas analizaremos el cambio tan importante que lleva tiempo produciéndose en una sociedad que, antiguamente, no veía con buenos ojos el hecho de hablar sin tapujos sobre este tipo de elementos placenteros. Por el contrario, hoy en día se trata de un tema recurrente incluso entre personas que no tienen un vínculo de confianza extremadamente estrecho.
Adiós a los tabúes
No hay que echar la vista muy atrás para dar con una época en la que prácticamente nunca surgía un tema de conversación relacionado con darse placer a uno mismo. De hecho, incluso en las escuelas se educaba a los alumnos para que no sacasen a colación este tipo de conceptos.
Sin embargo, pronto se averiguó que la represión era contraproducente. La falta de educación sexual se traducía no solo en insatisfacción a posteriori, sino también en una mayor probabilidad de acabar cometiendo errores en el uso de elementos como los preservativos, acarreando un cierto riesgo de traer al mundo una nueva vida de manera involuntaria.
Poco a poco tanto en las escuelas de Educación Primaria como sobre todo en los institutos empezó a invertirse en un nuevo tipo de educación. Evidentemente no era viable introducir asignaturas, pero sí alguna que otra charla realizada por expertos en la materia y a las que los estudiantes acudían con ganas de aprender e interiorizar conceptos.
Uno de los primeros detalles de suma trascendencia guarda relación con entender que no hay nada malo en el placer que uno mismo se da o en aquel que se le otorga a otra persona por medio de relaciones sexuales cien por cien consentidas.
En algunos talleres que se organizan en ámbitos lectivos incluso se dejan ver algunos juguetes eróticos, enseñándoles a los jóvenes la manera de utilizarlos de manera higiénica a la par que segura.
Por supuesto, tarde o temprano llega el momento de permitir a los estudiantes la formulación de preguntas. Despejar sus dudas es esencial para que la educación sexual sea fructífera en todos los sentidos.
¿Sabías que algunas de las cuestiones hacen referencia al estimulador de clítoris? Efectivamente, las chicas quieren saber si es tan placentero como aparenta ser en base a las opiniones que las usuarias han ido publicando en las redes.
Antaño era impensable que tanto las féminas como los chicos pudieran formular preguntas sin tapujos, sobre todo al estar en un ambiente colectivo formado por otros compañeros. Sin embargo, gracias a alejar por completo los tabúes, a día de hoy es más que habitual. En este sentido, el juguete erótico recientemente mencionado ha sido de gran ayuda.
Todos hablan del succionador de clítoris
Con el adiós de las fiestas navideñas también se despiden las cenas familiares en las que son múltiples los temas de conversación que van surgiendo. El de la política es uno de los recurrentes, aunque no se queda atrás el más íntimo de todos, el cual suele surgir cuando la comida ya está algo avanzada y la complicidad empieza a hacer acto de presencia en la mesa.
Es entonces cuando en muchas reuniones familiares se ha acabado mencionando el Satisfyer Pro 2. Se trata del modelo de succionador de clítoris más vendido en 2019. Durante el transcurso del año que ahora dejamos atrás ya de por sí adquirió una gran popularidad.
Así lo demuestran las redes sociales. Portales como Twitter diariamente reciben multitud de publicaciones que guardan relación con el citado producto. Precisamente en este tipo de comentarios se hace referencia a las apariciones televisivas, tales como las de La Resistencia.
En el famoso programa presentado por David Broncano, del cual ya hemos hablado en alguna otra ocasión en Diariocrítico, ha hecho acto de presencia en varias ocasiones el Satisfyer Pro 2. De hecho, incluso la invitada en cuestión ha afirmado haber hecho uso de él, con la consiguiente recepción de una gran dosis de placer.
Este tipo de escenas en público anteriormente eran del todo impensables. Afortunadamente la educación sexual detallada en anteriores párrafos poco a poco empieza a dar sus frutos, dando buena cuenta de ello el público más juvenil. Sin ningún tipo de duda el estimulador de clítoris es el mejor ejemplo actual de lo mucho que ha llegado a normalizarse el placer íntimo en tan poco tiempo.
Todo parece indicar que la sociedad seguirá abriéndose más si cabe conforme vayan pasando los años, dando pie a que hablar de juguetes eróticos, métodos anticonceptivos y otros aspectos similares sea algo habitual, beneficiando así a los más jóvenes.
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