El arzobispo de Barcelona y cardenal Juan José Omella, representante de la línea blanda cercana al Papa Francisco, es el nuevo líder de la Iglesia española tras ganar las elecciones de la Conferencia Episcopal (CEE).
Omella ha sido elegido presidente para un mandato de 4 años, entre 2020 y 2024, y sustituye en el cargo al arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, que ocupaba este cargo desde el año 2014. En la actualidad, era miembro del Comité Ejecutivo y miembro de la Comisión Episcopal de Pastoral Social. Fue Consiliario Nacional de Manos Unidas (1999-2015).
Es original de Cretas, provincia de Teruel. Estudió en el seminario de Zaragoza y en Centros de Formación de los Padres Blancos en Lovaina y Jerusalén. Fue ordenado sacerdote en 1970 y trabajó como Coadjutor y como Párroco y entre 1990 y 1996 como Vicario Episcopal en la diócesis de Zaragoza. Durante un año fue misionero en Zaire.
Fue nombrado cardenal por el papa Francisco en 2017 y el sumo pontífice también le nombró miembro del Tribunal Supremo de la Signatura Apostólica.
Omella fue noticia en 2016 por una ancédota, cuando encomendaba en una carta a los fieles a rezar para que lloviese, "la tan deseada agua para los campos, los pueblos y las ciudades", cuando hacía más de 90 días que no se registra ninguna precipitación en el área metropolitana de Barcelona.
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