Por qué PSOE y Unidas Podemos renuncian a proponer el impuesto a las rentas altas ahora

Según trascendió a lo largo de la jornada del miércoles, los dos partidos que integran el gobierno de coalición, PSOE y Unidas Podemos, han acordado renunciar por ahora a proponer el impuesto a las rentas altas como parte de las soluciones para salir de la crisis del coronavirus.

El plan inicial de los de Pablo Iglesias era salir de la Comisión parlamentaria para la Reconstrucción con un compromiso para subir estos impuestos vía IRPF, pero no ha habido acuerdo.

El motivo no parece ser otro que los indicadores económicos no permiten invitar ahora a más retos a las finanzas nacionales, sobre todo tras los últimos datos de las previsiones del FMI, que avisan de una caída del PIB para España de casi el 13% para este 2020, por mucho que se recupere gran parte en 2021 y 2022.

Es por eso que el PSOE ha convencido a Unidas Podemos para aparcar por ahora este impuesto a los ricos y acercarse así al resto de los grupos parlamentarios en busca de un acuerdo mayoritario en un momento donde es necesario dar una imagen de unidad. Por ejemplo, con este gesto será más fácil acercarse a un pacto con Ciudadanos, para que se sume a los acuerdos generales de la Comisión de Reconstrucción.

Y hay más cesiones: los morados también renuncian temporalmente a tumbar la reforma laboral, ya que han ido entendiendo la debilidad parlamentaria y las dificultades que depararía la ausencia de una legislación laboral más compleja que las anteriores, que sería lo que ocurriría en caso de derogación de la ley de 2012.

El compromiso pasa por revisar los impuestos en los próximos meses y acercar criterios de fiscalidad a las tendencias generales en Europa, centrándose por ejemplo en el impuesto a las multinacionales tecnológicas, donde hay consenso en la UE para actuar sobre compañías como Google, Facebook o Amazon, entre otras norteamericanas. También se busca un acuerdo en cuanto a impuestos verdes para reforzar la apuesta por la Transición Ecológica.