¿Golpe de efecto de Interior o de la izquierda abertzale?

En un comunicado, el Departamento de Interior precisó que sobre todo ellos pesaba una orden de busca y captura de la Audiencia Nacional por su supuesta pertenencia a la organización ilegalizada Segi. La Ertzaintza, que precisó que no se han producido incidentes en las detenciones, aseguró que sigue pendiente de localización y detención Gorka Betolaza Villagrasa.

   Estos jóvenes, entre los que se encuentran Olatz Dañobeitia, miembro de la comisión negociadora de Batasuna, estaban siendo buscados desde que se dio a conocer la sentencia del Tribunal Supremo por el que se consideraba a Jarrai, Haika y Segi como organizaciones terroristas y condenaba a un total de 23 personas a seis años de cárcel. Cuatro de ellos fueron detenidos en los días posteriores a conocerse la resolución y el resto permanecían huidos de la Justicia.

   Junto con los condenados, en el Frontón de la Esperanza se encontraban varios centenares de jóvenes y dirigentes de Batasuna como Arnaldo Otegi, Jone Goirizelaia, Joseba Permach o Juan José Petrikorena. Previamente a la aparición de los 18 jóvenes, Jone Goirizelaia había denunciado la prohibición de las manifestaciones convocadas para este domingo por el movimiento juvenil vasco. La primera de ellas fue prohibida por el juez Baltasar Garzón al considerar que estaba organizada por Segi.

   Tras esa prohibición, un particular convocó ayer una nueva manifestación para hoy a las doce del mediodía en el Arenal, que fue prohibida por Interior al considerar que era una "mera sustitución" de la anterior. Finalmente, fue desconvocada ayer por la tarde. En concreto, Goirizelaia denunció que las concentraciones prohibidas por el Departamento de Interior y el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón eran "el ejercicio de un derecho fundamental", impedido por la actuación de la Ertzaintza.

   "Nos mantenemos en una situación de excepción, donde los derechos fundamentales de una parte de la ciudadanía del País Vasco siguen siendo vulnerados, golpeados, interrumpidos por la fuerza. Cuando se está reivindicando el diálogo y el acuerdo para buscar soluciones, no es admisible la fórmula de los golpes, de la disolución de manifestaciones, de impedir el ejercicio de un derecho fundamental", añadió.

   A pesar de la prohibición de las movilizaciones, varios centenares de jóvenes se encontraban esta mañana por el Casco Viejo y, en un momento determinado, todos ellos se dirigieron al Frontón de la Esperanza. En su interior, aparecieron todos los huidos, excepto Gorka Betolaza, que anunciaron su intención de permanecer en el Frontón hasta que llegara la Ertzainza para proceder a su detención. Los asistentes desplegaron una pancarta en euskera en la que se podía leer  "Dale una oportunidad a la independencia. Juventud vasca adelante".

   Uno de los condenados, Ibon Meñika, tomó la palabra y acusó al presidente del Gobierno central, José Luis Rodríguez Zapatero, de "condenar" a la juventud vasca que apuesta "por la resolución del conflicto".  Asimismo, tras pedir el apoyo de la sociedad a los jóvenes vascos aseguró que la organización y la lucha son necesarias para que se respeten "los derechos políticos que a este país le corresponden" y para que la solución al conflicto "llegue a buen puerto". Meñika hizo un llamamiento para que la ciudadanía participe en la manifestación convocada para el 10 de febrero por el movimiento juvenil vasco.

   A la una y diez de la tarde accedieron efectivos de la Ertzaintza al interior del Frontón y los detenidos se colocaron en una esquina con la citada pancarta, mientras que los jóvenes asistentes se sentaron en el suelo rodeándoles. Finalmente, a las dos menos cinco de la tarde, la Policía Autónoma empezó a desalojar, uno a uno a los condenados, que fueron detenidos, sin oponer resistencia y entre los gritos de apoyo de los jóvenes que se encontraban en el lugar.

Pasadas las dos y diez de la tarde, concluyó la detención de los 18 jóvenes y momentos después abandonaban el lugar los concentrados dentro del Frontón, así como los dirigentes de Batasuna que se encontraban en la zona.

Askatasuna habla de "decisión política" del Gobierno Zapatero

Azkatasuna afirmo que la detención de las 18 personas condenadas en el caso Jarrai-Haika-Segi responde a una "decisión política" por parte del Gobierno central. En un comunicado, aseguró que el Ejecutivo de Zapatero y su "delegado, el PNV, están demostrando que "no quieren una paz verdadera".

   En un comunicado, Askatasuna señaló que los jóvenes arrestados han sido detenidos por trabajar "en favor de la independencia" y denunció que sea "suficiente" el hecho de ser joven e independiente para que se pueda ser "juzgado y encarcelado".

   Askatasuna manifestó que esta "decisión política" tomada por el Gobierno central cierra las "vías políticas". Asimismo, indicó que lo único que traerá la paz es un nuevo marco que ofrezca "a Euskal Herria las oportunidades para la independencia". "Solo un pueblo que sea dueño de su palabra con libertad conocerá una paz verdadera", añadió.

   En este sentido, afirmó que el Gobierno central y el que está actuando "como su representante, el PNV", están evidenciando que no quieren "esa paz". Askatasuna acusó al PNV de poner una "alfombra roja" al proyecto del PSOE, partido que, a su juicio, está agradeciendo "muy bien a Imaz todo lo que hace por ellos y no se sabe muy bien a cambio de qué".

PP denuncia la "ineficacia" de Interior 

El secretario general del PP, Angel Acebes, denunció la "ineficacia y descoordinación" del Ministerio del Interior al permitir que los 19 condenados del caso Jarrai-Haika-Segi "hagan este ejercicio de burla, descaro y prepotencia", en alusión al encierro en el Frontón de la Esperanza de Bilbao, donde permanecieron hasta que fueron detenidos.

   "Me parece que es muy fuerte y que algo no funciona desde el Ministerio del Interior para que permita ese ejercicio de burla hacia el Estado de Derecho y de descaro", señaló Acebes en rueda de prensa, por lo que consideró que el titular de dicho Departamento, Alfredo Pérez Rubalcaba, debería dar explicaciones sobre por qué ha ocurrido esto. 

   "Esta vez, que no se parapeten en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, ya se comenzó con descoordinación y ha terminado en un despropósito uno tras de otro", dijo.   Igualmente, Acebes subrayó que las detenciones deberían haberse producido desde el primer momento que se conoce la resolución judicial, sin permitir este tipo de actos propagandísticos a favor del entramado terrorista.

   "No debería haber ocurrido y tendrían que haber sido detenidos por la acción del Ministerio del Interior y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad inmediatamente cuando se produce la resolución judicial", reiteró.