La mala pata de Zapatero

El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, cumplió este domingo uno de sus sueños, el de reunirse con el flamante presidente de Estados Unidos, Barack Obama. . Ahora bien, ante los ojos estadounidenses, esa reunión ha quedado eclipsada, al menos por el momento, por el desafío que ha mandado al mundo Corea del Norte con el lanzamiento del ya famoso misil Taepodong 2. Y es que parece que Zapatero ha tenido mala pata con la fecha de su esperada reunión: la política suicida de Pyongyang y las reacciones que ha suscitado han hecho que casi nadie hable del 'meeting' ZP-Obama.

Este domingo todos los medios estadounidenses están centrados en sus ediciones digitales en el lanzamiento del misil norcoreano, en el mensaje esperanzador que ha dado Obama al hablar de "un mundo sin armas nucleares" y de lo que pueda salir de la reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas. Quizás mañana, algún diario dedique unas líneas a esa nueva etapa de entendimiento entre los gobiernos de EEUU y España, pero, de momento, nadie presta atención a un encuentro en el que naturalmente no ven la misma fuerza que en las entrevistas que Obama ha desarrollado con su "nuevo tono pragmático" -como dicen los analistas- con los líderes de China o Rusia, y que tiene un interés mucho inferior a los desaires de Corea del Norte.

Y es que España, pese a que Obama reconozca "la extraordinaria influencia de España en el mundo", no es ni Rusia ni China, y los españoles seguirán sabiendo quién es Obama pero la mayoría de los estadounidenses seguirán sin tener ni idea de qué político gobierna en ese país cuya capital es Madrid. ¿O era Barcelona?