Respecto a la política económica, el gran punto de esta IV Conferencia de presidentes, los representantes del PP han rechazado en términos globales el proyecto gubernamental de Economía Sostenible, dado que, argumentan, en este momento en el que las CCAA sufren la mayor restricción financiera de su historia, lo que se está provocando es que se reduzcan los recursos dedicados a servicios tan esenciales como la Sanidad y la Educación en los Presupuestos Generales del Estado.
Tal y como concretaron en el almuerzo mantenido el pasado viernes con el presidente nacional,
Mariano Rajoy, para articular una posición común, desde la madrileña
Esperanza Aguirre al valenciano
Francisco Camps han mantenido como tónica general que la fuerte restricción financiera actual es consecuencia de la crisis española y de las “desacertadas políticas económicas del Gobierno”, que habrían conducido al país a la mayor tasa de paro y destrucción de empleo de los países desarrollados.
En ese sentido, los presidentes autonómicos del PP han reclamado en la Conferencia una política económica “coherente y valiente” para abordar las reformas imprescindibles para salir de la crisis. Ahí es dónde se han ceñido al decálogo de propuestas ultimado el viernes con el propio Rajoy.
En lo referente al sector agrario -abordado en la Conferencia, junto a la cuestión del agua, por exigencia del PP-, Camps, Aguirre,
Sanz, Valcárcel, Herrera y
Núñez Feijóo han puesto de manifiesto los datos ya publicados sobre que el campo español padece la crisis más severa de su historia, con una caída de la renta agraria cifrada en un 26 % desde el año 2004, lo que significa un empeoramiento de los ingresos ya que los costes superan el 80% de la producción final.
En el ámbito ganadero han destacado tanto la delicada situación que atraviesa el sector lácteo, como el sector pesquero, en el que la condición de baja rentabilidad se repite, en especial la de nuestra flota artesanal lo que requiere un esfuerzo de recuperación de nuestros caladeros.
En general, el PP acusa al Gobierno de no responder a las necesidades de los agricultores, ganaderos y pescadores, “dando la espalda a sus problemas y no adoptando medidas efectivas para que estos sectores recuperen la rentabilidad y competitividad que han perdido en los últimos años”. El Ejecutivo, en opinión del PP, tampoco ha sido capaz de poner en marcha una política hidrológica coherente y eficaz. Y, como estaba previsto, los representantes del PP han presentado un decálogo en materia de agricultura, pesca, ganadería y agua, aprobado también en la cumbre ‘popular’ del pasado viernes.
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