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La reforma fiscal de Salgado incluirá gravámenes sobre la emisión de CO2

El Gobierno llevará los impuestos 'verdes' a los hogares en 2010

El Gobierno llevará los impuestos 'verdes' a los hogares en 2010

> La presentación de los Presupuestos de este sábado avanzará el camino de una 'ecotasa'
> El Gobierno se guarda la verdadera reforma fiscal para la Ley de Economía Sostenible

viernes 25 de septiembre de 2009, 20:51h
El Gobierno está planteando la forma de introducir un impuesto verde para 2010, que puede afectar a los hogares, las industrias y los combustibles. Parece que esta es la mejor oportunidad, ya que las cuentas del Estado necesitan 15.000 millones de euros más de ingresos fiscales, según reconoció el presidente José Luis Rodríguez Zapatero.

Así que, dentro de la subida de impuestos que el Ejecutivo prepara, entrará de alguna forma la ecotasa. Este sábado la vicepresidente económica, Elena Salgado, ofrecerá, tras el Consejo de Ministros en el que se aprueba los presupuestos, alguna pista de por dónde irá la reforma.

 

El grueso de la subida de impuestos se presentará este sábado, en el proyecto de Presupuestos que el Gobierno enviará al Congreso. Ahí se retocará lo ya anunciado, el IVA, la supresión de la deducción de 400 euros y el gravamen sobre las rentas de capital. Pero, otra parte, la cuestión ‘verde’ se dejará presumiblemente para la futura Ley de Economía Sostenible.

 

Los partidarios de este impuesto aseguran que es una manaera de que los hogares y los grandes consumidores sean conscientes del uso de la energía que hacen, racionalizando el gasto.

 

¿Qué opciones verdes tiene el Gobierno para subir los impuestos? La más fácil y probable consiste en gravar los combustibles con una ecotasa. Los expertos y el Ministerio de Economía y Hacienda creen que hay margen para subir los impuestos de los combustibles, por el diferencial respecto a los países de la Unión Europea y porque España está en un momento de baja inflación, con lo que no tendría un gran efecto en los precios.

 

De hecho, el céntimo ecológico ya fue incluido en el programa electoral socialista de 2004, pero nunca fue aprobado. “Llegó el momento en el que había que bajar los impuestos de una manera compulsiva”, según el ex diputado Manuel Marín, que ahora se ha convertido en un experto de políticas verdes.

 

Pero hay alternativas más sofisticadas, que en cualquier caso se deberán despejar en la Ley de Economía Sostenible. Una de ellas se basaría en la iniciativa francesa de crear un nuevo impuesto que obligará a pagar 17 euros por cada tonelada de dióxido de carbono que se emita por el uso del petróleo, gas y carbón, aunque se compensará a los hogares con un cheque verde en el IRPF.

 

Así lo apuntaba el jueves el Ministerio de Fomento, José Blanco, quien indicaba que, más bien, los impuestos ecológicos “tienen que ver con la emisión de CO2”. Además apuntaba que la ley incluirá “estímulos fiscales”, pero una vez más, en el estilo del Gobierno, sólo lo presentaba como un anuncio, sin ofrecer detalles adicionales.

 

Para el PP, existe una posible ecotasa que se incorpora al sistema tributario para poder mejorar el medio ambiente y otra “que buscando el bonito nombre, lo que hace es justificar una subida de ingreso para poder tapar el agujero negro que tiene el Gobierno”, acusa José Luis Ayllón, número dos del grupo parlamentario popular. “Este es del segundo tipo, claramente”, asegura.

 

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