Zapatero "dejó muy clara la posición del Gobierno", según la nueva versión de
Fernández de la Vega tras el Consejo de Ministros: que la sentencia del Tribunal Constitucional "ha venido a avalar el Estatut de Cataluña que promovimos", así como los "estatutos de segunda generación"; es decir, el resto de los estatutos que se han reformado: "Avala lo que nosotros impulsamos y se ha cumplido el objetivo del Gobierno de impulsar esas reformas de los estatutos de segunda generación". A partir de ahí, lo queda es el "desarrollo constitucional" de la reformas.
[Zapatero dijo el jueves que "por supuesto, voy a recibir al president Montilla" para "
analizar la sentencia y, en su caso, si hubiera que tomar alguna iniciativa, para reforzar lo que es el esfuerzo de desarrollo del Estatuto que hemos hecho". Más claro imposible: se cambiarán las leyes que haga falta para impedir que lo declarado inconstitucional por el más alto tribunal español recorte el Estatut, que era, justamente, la pregunta que se le había formulado a Zapatero].
¿Y qué significa "reforzar el Estatut" cuando hay una sentencia que lo recorta? Para De la Vega, está claro: "El propio presidente señaló que debemos ser prudentes y conocer el contenido de la sentencia", porque a partir de ahí se adoptarán "en su caso" las decisiones normativas necesarias para reforzarlo en el marco que permita la sentencia del Constitucional. Pero "seguro que hay espacio". En este sentido, confirmó que un poder judicial independiente en Cataluña -como en realidad plantea el Estatut y que el Constitucional ha recortado- tiene "posibilidades" de desarrollarse pese a la sentencia 'reformando' -"desarrollando", dice De la Vega- la Ley Orgánica del Poder Judicial (sic).
Por lo demás, De la Vega se mostró más ocupada en cargar todas las tintas contra la irresponsabilidad del PP, que no tuvo otra ocurrencia que enviar el Estatut al Tribunal Constitucional. "Durante cuatro años, el PP ha estado criticando el Estatuto de Cataluña" y buscando "la confrontación desde cualquier perspectiva", pidiendo firmas en la calle, apelando al principio del fin del Estado, etcétera, y los mismos -
Rajoy y
Aznar- "piden concordia y serenidad" ahora, y esto ahora "me parecer una hipocresía", dijo De la Vega.
Las declaraciones de los populares sobre esta sentencia denotan, para De la Vega, "la baja autoridad del señor Rajoy en su partido", sobre todo después de escuchar a José María Aznar este mismo viernes que ha venido a decir en el Campus de Verano de la FAES que "hemos estado al límite de un Estado fallido". Esto demostraría "el barullo de dirigentes del PP, que están contrariados por el varapalo que les ha dado la sentencia del Tribunal Constitucional". Así que, De la Vega da sus consejos prácticos: "Más que llamar a la serenidad, deberían serenizarse ellos, tranquilizarse".
En definitiva, que "el gobierno confió siempre en la constitucionalidad del Estatuto de Cataluña" y que "el Constitucional ha venido a avalar la práctica totalidad del Estatuto", y ahora lo que tenemos que hacer es, "con la prudencia razonable", esperar y estudiar la sentencia y abordar el desarrollo de esa sentencia para cumplir las máximas expectativas de desarrollo de ese estatuto.
No a la Ley de Huelga
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Por otra parte, la vicepresidenta primera se ha referido a la situación crítica que se vive en Madrid debido a la huelga salvajemente política que están haciendo los sindicatos presentes en el Metro. Y más concretamente, al
incumplimiento de los servicios mínimos por los huelguistas y a la posibilidad de elaborar una Ley de Huelga. "Es un debate muy antiguo… pero yo creo que tampoco es el momento". Es decir, que no habrá tal ley.
Sí ha reiterado De la Vega que el gobierno es "respetuoso" con el derecho a la huelga y también con los ciudadanos a acceder a los servicios mínimos. "Nuestra solidaridad con todos los madrileños", dijo, junto a un llamamiento al Gobierno de Madrid "que es quien tiene que solventar el conflicto y garantizar el cumplimiento de la ley".
Finalmente, y en lo relativo al debate sobre el estado de la Nación, De la Vega ha confirmado que esta semana próxima llegará al Parlamento la comunicación del Gobierno, y que más allá que hacer un balance de lo que han hecho los socialistas en esta etapa en lo que se va a centrar el debate es en "marcar objetivos", determinarlos, adquirir nuevos compromisos.
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