Zapatero, con fecha de caducidad obligada en el PSOE, ve peligrar su cabeza

Y es que el debate no es sino una evidencia del poder debilitado que tiene Zapatero en el PSOE, partido que ve ya imposible ganar las elecciones de dentro de año y medio con las actuales perspectivas. Y mucho menos con el actual líder. De momento, no se trata de pequeños rebeldes aquellos que alzan su voz. Ya son varias las voces críticas a Zapatero o que al menos recuerdan que el actual presidente no es eterno.

Es lo que ha sucedido con Tomás Gómez este jueves. El secretario general de los socialistas madrileños comienza a tomar revancha por la afrenta recibida este verano, cuando fue obligado por Zapatero a apartarse de la cabeza de cartel electoral para las autonómicas de la próxima primavera. Algo que Gómez no acató, presentó batalla y ganó frente a Trinidad Jiménez unas primarias que, en realidad, eran una guerra frente a Ferraz.

Gómez, con toda claridad, lanzó la bala: "La cultura política española debería incorporar, y no sólo mi partido, una limitación real del poder a sólo dos mandatos". Se ha iniciado el acoso y derribo del 'zapaterato'. Sus declaraciones se suman a una posición similar manifestada hace unos días por el presidente castellano-manchego, José María Barreda.

En realidad, lo que hace Gómez es llevar al extremo lo que estipulan los estatutos del PSOE, en cuya “Disposición adicional quinta” se establece que “ningún cargo orgánico ejecutivo podrá ser ocupado por la misma persona durante más de tres mandatos consecutivos”, tal y como Diariocrítico informó en su momento, abriendo así un debate interno.

Esos Estatutos, claro, se refieren a los cargos del partido; ahora bien, según lo mismo, Zapatero debería dejar de ser secretario general socialista en el próximo Congreso, a celebrar como muy tarde en 2012. Pero no se estipula nada de los cargos en el Gobierno. Gómez, sumándose a Barreda, ha explicitado su deseo de que España se regenere políticamente y que se haga un acuerdo entre todos los partidos para limitar los cargos públicos a un máximo de dos mandatos.

¿Y quién le sustiuiría?

Éste es ya otro debate muy distinto. Nadie, hoy por hoy, ha alzado su voz para proclamarse candidato a secretario general. No es ningún secreto que, en todo este tiempo de dificultades para el Gobierno, la llamada 'vieja guardia' gana enteros frente al actual equipo directivo. Los Solana, Rubalcaba, Bono... siguen siendo nombres que apuntan alto en las encuestas. El primero y el último ya se han autodescartado, al menos de cara a la galería. El segundo, Rubalcaba, actual ministro de Interior, ni quiere entrar en el debate, pasando por hombre fiel a su presidente.

Sin embargo, es Carme Chacón, una mujer, catalana, y ministra del actual Gobierno, la que ha saltado a la palestra en las últimas semanas, si bien su nombre siempre apuntó alto. Y si alguien ya pensaba que Zapatero piensa en designarla sustituta a dedo, Bono y otros socialistas se blindan ante la posibilidad. No quieren otro caso Aznar en el PP, cuando colocó como sucesor a Mariano Rajoy de esta manera tan polémica y controvertida.

Precisamente la ministra Chacón se refirió ayer a su afirmación de que España ya está preparada para tener una presidenta, y comentó que la noticia habría sido que hubiera dicho lo contrario. Pero un día antes ya acalló cualquier rumor sobre su condición de candidata a sucesora de ZP.

 
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