Creador de una innovadora "Escuela de Desarrollo Personal"
Javier Revuelta, la capacidad del individuo para descubrir su propio potencial
Por Manuel Ángel Menéndez
Para algunos resultará algo exótico, o lo acogerán con incredulidad, pero
para Javier Revuelta es la propia capacidad del individuo "la que
transforma una habilidad social en valor agregado"; es decir, que es nuestro
propio y particular potencial creador el que nos singulariza, y de ahí surge su
línea de emprendeduría: a través del entrenamiento adecuado, moldear de manera
intencionada la propia energía de cada uno para sanar, o para desarrollar
proyectos con entidad creativa. Nace así el terapeuta energético, una vía de
negocio sin duda novedosa... y una escuela que abrirá sus puertas en septiembre
de este año.
Javier Revuelta Blanco (Torrelavega, Cantabria, 1963) ha apostado por una
línea que quizá a algunos les resulte curiosa, pero que viene avalada por muchos
años de estudio y de investigaciones, de esfuerzo y de superación personal, de conferencias
en España y el extranjero. Digamos que se trata de aprovechar, de reconvertir
nuestra particular energía para nuestro propio provecho. Y para enseñar su uso
y utilización va a nacer en Santander este mes de septiembre una "Escuela
de Desarrollo Personal" que ya tiene muchos virtuales clientes.
Así lo explica el propio Revuelta: "En esta investigación he
descubierto que el amor es la fuerza más poderosa con la que contamos para
sanarnos; y, que a partir de ella, nos facultamos para desplegar el enorme
potencial creador que nos singulariza. El amor es una energía que se expande de
manera progresiva, siguiendo un movimiento oscilatorio de contracción y
apertura. Esta energía se encuentra en el universo y puede activarse de muy
diferentes maneras. Cuando accedemos a esta magnífica pulsión de fuerza nos
hacemos uno con el universo y, si tenemos el entrenamiento adecuado, podemos
moldearla de manera intencionada. Entonces nos habilitamos para sanar a otras
personas o para desarrollar proyectos con entidad creativa".
Ese es, en esencia, el proyecto de este emprendedor cántabro que, profundizando
en la naturaleza humana, ha constatado cómo las personas, si bien presentan una
enorme diversidad de formas expresivas, responden a motivaciones muy similares.
Es decir, que la mayor parte de sus problemas presentan una sintomatología
diferente, pero argumentan una base común arquetípica.
Aplicación de nuevas técnicas sanadoras
Las experiencias transformadoras de Javier se ampliaron con nuevas técnicas
sanadoras: meditación, bioenergética, imposición de manos, constelaciones
familiares, biorresonancia, chamanismo, polaridad energética, yoga kundalini...
"Viajé por algunos países y me encontré con gente muy evolucionada que me
ayudó a no perder la curiosidad por el misterio de la vida", y se incorporó
a la Escuela de Barbara Ann Brennan para aprender a cargar, regular y
equilibrar los campos de energía que sostienen la vida y la salud; y,
posteriormente al Centro de formación de Yoguis Witryh.
Paralelamente, Javier comenzó a formar a otras personas en el
descubrimiento de sus propias capacidades personales y profesionales: "Comprendí
que la aplicación de técnicas de relación humana que no están interiorizadas
conduce a la desilusión y al desengaño, por lo que introduje en mis enseñanzas
la idea del desarrollo personal".
En el año 2008, después de una dilatada experiencia en e-learning y en
formación presencial (por sus manos han pasado más de 3.000 personas), Revuelta
comenzó a trabajar como terapeuta energético. En ese tiempo, la Global Stell
Wire le llamó para trabajar como entrenador en desarrollo personal (coach),
labor que realizó durante 3 años. Allí adquirió una magnífica experiencia en el
entrenamiento de equipos humanos y en el desarrollo personal aplicado a
empresas.
Hace ahora tres años, un alumno llegó a Cantabria desde Alicante para
participar en un curso sobre gestión del estrés que Revuelta impartía con el
Colegio Oficial de Químicos de Cantabria. Ese fue el germen del proyecto
social-empresarial que ahora se pone en marcha.
El desarrollo personal y el potencial interior de las personas
"Salvador Muñoz me dijo que su vida había cambiado totalmente desde
que comenzó a trabajar en su desarrollo personal y que deseaba dedicarse
íntegramente a progresar como ser humano. Como manteníamos una relación
esencial, rápidamente comenzamos a idear proyectos. Finalmente surgió la idea
de hacer una Escuela dedicada íntegramente a descubrir el potencial interior de
las personas y a ayudarlas a lograr sus anhelos personales. A este proyecto se
unió Raquel Losantos, mi actual compañera, Ana Rico, Carlos Arrollo, Sosia Sosa
Carmona, Karmele Gurruchaga y Laura; todos ellos alumnos entusiasmados con la
idea de la escuela".
Es más que un proyecto empresarial; y es que Javier Revuelta siente la necesidad
de crear esta escuela dedicada al desarrollo de las personas, en la que se
condensan todas sus experiencias como investigador, formador y terapeuta.
"En mi opinión, el desarrollo personal se fundamenta en unas bases
científicas que no son difíciles de comprender. Con frecuencia me encuentro
mucha gente que sigue técnicas o rutas sanadoras de manera adictiva,
simplemente porque les procuran un escape en relación a su sufrimiento o porque
les generan sensaciones agradables. También observo entre los asistentes a mis
cursos un gran interés y una necesidad por comprender los procesos que activan
nuestra transformación interior, para lograr una mayor individualización y un
dominio completo sobre su propia vida".
El desarrollo personal en un cambio de modelo y de paradigma
A partir de esas experiencias obtenidas tras años de prácticas y estudios, Revuelta
cree que es urgente sentar esas bases no sólo para orientar a las personas que
desean mejorar algún aspecto de su vida, sino también para crear un puente
entre lo que podemos controlar y medir y aquello que trasciende los límites de
lo propiamente humano: encontrar un equilibrio entre la verdad objetiva y la
imaginación creadora.
Para Javier, éste es el momento adecuado para lanzar al mercado sus ideas:
"Nos encontramos en un momento de gran trascendencia histórica pues
estamos cambiando de paradigma; esto genera convulsiones en la sociedad, en los
grupos humanos y en los propios individuos: la forma tradicional de ver las
cosas está dando paso a una nueva concepción de la realidad y eso es algo que
no podemos negar por más tiempo".
Y ahí reside su oferta: un programa y un espacio de trabajo de carácter
científico y experimental que relaciona distintas corrientes, técnicas y
prácticas sanadoras con la idea de facilitar el proceso de transformación
personal y grupal hacia un estado de salud y bienestar más permanente. "Es
lo que practico y enseño en mis programas de formación sobre desarrollo
personal y competencial", explica.
En la actualidad la Escuela es un proyecto que verá la luz en Septiembre de
este año 2012. Ahora mismo están planificando y construyendo las bases
comunicativas, didácticas, financieras, humanas y tecnológicas. Su mayor
dificultad reside en hacerse presente en una dimensión empresarial desconocida
para él; no obstante, Javier tiene plena confianza en su equipo y en sus
propias capacidades personales.