El Gobierno estudia el papel que jugará España en la lucha contra el Estado Islámico

Así lo explicó el ministro de Defensa, Pedro Morenés, en declaraciones a la Cadena Ser pero no confirmó si el Gobierno aprobará ya la misión y tampoco reveló en qué consistirá exactamente la contribución española, aunque ya se ha anunciado que ésta podrá ir desde transporte y asesoramiento hasta envío de armas.

Morenés insistió varias veces en que España no participará en los bombardeos y no enviará tropas sobre el terreno, sino que "contribuirá a hacer aquello en lo que se le considere más eficaz", entre lo que ha apuntado el adiestramiento de las fuerzas armadas de otros países.

En todo caso, el ministro defendió que España ha estado participando en la coalición internacional "desde el principio, se diga lo que se diga", en referencia a las críticas que recibió el Gobierno por no estar presente en la reunión que celebraron algunos países durante la cumbre de la OTAN en Gales para abordar este asunto.

Diferencias con la guerra de Irak
Morenés aseguró que esta misión no tiene nada que ver con la guerra de Irak de 2003 porque ahora "las circunstancias son distintas", y es que "la situación tiene connotación internacional", es decir, "preocupa a todos los países" por la "amenaza real" que significa el Estado Islámico.

Además, recordó que este grupo terrorista no sólo opera en Irak, sino que tiene "influencia" en todo Oriente Próximo y tiene "capacidad" para dar el salto a otras "zonas más cercanas a España" como el Sahel.

Sobre el despliegue a partir de enero de una batería de misiles antiaéreos 'Patriot', así como 130 militares, en el sur de Turquía ante posibles ataques provenientes de Irak y Siria, Morenés explicó que se trata de una misión de la OTAN que comenzó antes de que surgiera el Estado Islámico y que se trata de una operación "disuasoria pura y dura" en la que España va a reemplazar a los Países Bajos, cuyo contingente lleva ya dos años allí.