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Malestar social y político con Alemania por haber facilitado el camino judicial a Puigdemont
(Foto: Twitter oficial Carles Puigdemont)

Malestar social y político con Alemania por haber facilitado el camino judicial a Puigdemont

viernes 06 de abril de 2018, 07:43h

La Audiencia Territorial de Schleswig-Holstein descartó ayer el delito de rebelión en el proceso de extradición a España de Carles Puigdemont y decretó su libertad bajo fianza de 75.000 euros. Según el tribunal, la imputación de delito de rebelión es "inadmisible" por no cumplirse el requisito de violencia, si bien estimó que sí puede ser aceptado el delito de malversación de fondos públicos, por lo que el proceso para una extradición sigue adelante.

Ahora, la decisión de la Justicia alemana de denegar la extradición por rebelión impediría al Tribunal Supremo juzgarlo por ese delito. Según el diario EL PAÍS, el Supremo estudiará las opciones para impedir que sólo sea juzgado por malversación, entre las que está que se haga una nueva petición a Alemania con otros delitos que el juez Pablo Llarena descartó en su auto de procesamiento como sedición, organización criminal y desobediencia.

"Alemania niega la rebelión y deja libre a Puigdemont", titula EL PAÍS. "La Justicia alemana niega a España juzgar a Puigdemont por rebelión", es el titular de EL MUNDO, que habla de "varapalo de la Justicia alemana". Para ABC, "el revés de la Justicia alemana a España agrieta el proceso por rebelión". "La Justicia europea da aire al golpismo", titula en primera. LA RAZÓN señala que "Alemania complica el juicio a Puigdemont al no acusarle de rebelión". "Puigdemont queda en libertad en Alemania y sin delito de rebelión", señala LA VANGUARDIA. Según EL PERIÓDICO, "Alemania tumba la causa por rebelión".

El Gobierno acogió con preocupación la decisión de la Audiencia de Schleswig-Hosltein sobre Puigdemont. Según fuentes de la Moncloa consultadas por el diario EL PAÍS, el Ejecutivo está "convencido" de que la justicia española adoptará las medidas "más adecuadas ante estas nuevas circunstancias para velar por el cumplimiento de las leyes de nuestro país". LA RAZÓN apunta que aunque la respuesta oficial es de prudencia, fuentes gubernamentales admitieron que se trata de "un jarro de agua fría".

Fuentes del PP citadas por LA VANGUARDIA tildaron la decisión de "desastre para España". La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, dijo que el Ejecutivo respeta la decisión de la Justicia alemana. "Hay que esperar a la notificación de esa decisión para conocer bien su fundamentación", dijo.

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, declinó opinar sobre la decisión de la Justicia alemana y dijo que "lo importante" es que se extradite a Puigdemont a la Justicia española para que rinda cuentas de lo que hizo.

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, aseguró que respetará a los separatistas catalanes "siempre y cuando respeten la Constitución española", aunque las resoluciones de los jueces españoles o alemanes puedan "gustar más o menos".

En Bélgica, otro varapalo

Además, la Justicia belga dejo ayer en libertad sin fianza y con medidas cautelares a los 3 ex consellers de la Generalitat huidos a Bélgica Antoni Comín, Lluis Puig y Meritxell Serret, a la espera de que se convoque en las próximas semanas la vista en que se examinará la euroorden tramitada por España contra ellos.

Los ex consellers no podrán salir del país, deberán disponer de domicilio fijo y comparecer cuando sean requeridos. Comín celebró la decisión del juez, que consideró una "victoria" y apuntó que la Justicia española debería "reflexionar sobre el abuso que está cometiendo".

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