El bulo de los privilegios de Pablo Iglesias e Irene Montero en el hospital con sus bebés

Muy doloroso ha sido esta vez el mezquino bulo que ha circulado estos días en correos y mensajes de móvil sobre los supuestos privilegios de Pablo Iglesias e Irene Montero en el hospital donde están siendo atendidos sus bebés, nacidos con tan sólo 6 meses de gestación.

El chisme difundido en algunos mensajes de WhatsApp aseguraba que el centro hospitalario donde están ingresados, el madrileño Gregorio Marañón, público, había cerrado una planta entera para dar privilegio en la atención de sus 2 niños. No hacía falta más que contactar con el hospital para negar tal extremo. El mensaje, en tono muy crítico con Podemos, decía: "¿A costa de quién? ¿Tienen todos los mismos derechos? Si te interesa que todo el mundo lo sepa, pásalo".

El Gregorio Marañón ha confirmado que el centro no cierra plantas para pacientes "con relevancia pública", sea quien sea, por lo que no ha habido excepción alguna con los bebés de los líderes de Podemos, Iglesias y Montero, pareja sentimental. El hospital también recuerda que no da datos sobre ingresados, por lo que explicó a 'El País': "Ni siquiera hemos confirmado ni desmentido que los hijos de Montero e Iglesias estén en el hospital, puesto que no se da información de ningún paciente sin su consentimiento". "Todos los pacientes son atendidos en igualdad de condiciones. Si un hospital público se planteara cerrar una planta cada vez que ingresa alguien con cierta relevancia pública, no habría plantas suficientes para atenderlos a todos", razonó.

Los bebés nacieron el 3 de julio a los sólo 6 meses de gestación, extremadamente prematuros.