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El ministro británico de Economía, Alistair Darling, confirmó hoy que planea aumentar la inversión del Estado en proyectos públicos para intentar frenar la recesión que ya ha empezado a afectar a varios países europeos.
En unas declaraciones al rotativo The Sunday Telegraph, Darling, que el próximo mes presentará los presupuestos preliminares, dijo también que se pedirán créditos para ayudar a las personas que buscan casa y para crear puestos de trabajo, después de que el índice de desempleo aumentara entre junio y agosto hasta los 1.79 millones de desempleados.
El periódico Financial Times ya publicó el sábado que el Gobierno tiene previsto cambiar las prioridades de inversión fijadas en su plan presupuestario a tres años, de 2008 a 2011, para impulsar cuanto antes la inversión pública, por ejemplo en hospitales y escuelas, a fin de reactivar la economía del país.
En el Telegraph, Darling admite que la recesión alcanzará indudablemente al Reino Unido, si no lo ha hecho ya técnicamente, y aboga por tomar medidas intervencionistas inspiradas en las teorías del economista británico John Maynard Keynes.
El ministro aclaró que, pese a que las prioridades presupuestarias serán la vivienda, la energía y la pequeña empresa, el Gobierno seguirá adelante con costosos planes ya presupuestados como la modernización del sistema de disuasión nuclear Trident, una nueva línea de ferrocarril para Londres y las inversiones para los Juegos Olímpicos.
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