La confesión del cardenal fue una de las pocas cosas en las que se empleó con cierta rotundidad en este Foro -a excepción de ese comentario jocoso sobre el 'calvario'- y en el que además se le preguntaron muchas cuestiones generales, que más o menos esquivó con la tradicional cautela eclesiástica y sin comprometerse mucho.
Pero el expresidente de la Conferencia Episcopal Española, sí dejo claro el escaso tiempo que dedica a escuchar la emisora que depende precisamente de la Conferencia, lo que él negó
-"no es una institución de la Conferencia"- aunque explicó que tampoco escucha otras emisoras.
Con respecto a esta emisora, no obstante, siguieron las preguntas para
Rouco Varela, sobre todo referidas a la renovación de
Jiménez Losantos -al que alguien calificó como
"ateo"- y
César Vidal. También Rouco se desmarcó diciendo que eso
"son cosas del Consejo de Administración",con las que él no tenía nada que ver.
Aunque añadió que él, que se considera
"un hombre de paz", no es amigo de ningún tipo de guerras, incluidas las radiofónicas y periodísticas tan de moda. Pero a pesar de la insistencia en ésta y otras preguntas comprometidas, se cerró en banda y se dedicó a generalizar expresiones de lugares comunes, echando balones fuera.
Rouco aseguró hoy que la jerarquía católica vive con el Gobierbo un
"calvario" de décadas con la clase de Religión y añadió que "
si seguimos nosotros pacientemente esa subida al calvario, a lo mejor algún día vemos el triunfo de la resurreción". Durante este Foro de la Nueva Sociedad, organizado por Nueva Economía Fórum con el patrocinio de la Fundación ONCE y la Fundación Pfizer, Rouco calificó de
"problema pendiente" el que enfrenta a la Iglesia y al Gobierno sobre los reglamentos que desarrollan la Ley de Educación (LOE).
El arzobispo de Madrid dijo, no obstante, que no renuncia a que ese problema "pudiera verse aminorado en sus dificultades y aliviado en la forma práctica de llevarse a cabo la aplicación de la ley (LOE)".
Agregó que esta situación "no es nueva". "Es una especie de calvario el de la clase de Moral Católica que estamos viviendo desde hace casi dos décadas, lo cual quiere decir que si seguimos nosotros pacientemente esa subida al calvario, pues a lo mejor vemos el triunfo de la resurección", dijo.
También abogó por informar y formar a la opinión pública sobre "el valor del principio de la libertad de enseñanza" y su forma correcta de ser interpretado dentro de un contexto de bien común.
En este sentido, dijo que a la gente hay que "hacerle caer en la cuenta de que los padres son los primeros educadores de sus hijos, lo decisivo que resulta que intervengan en el proceso educativo y casi lo inexcusable de que pidan que la educación no sea un asunto que esté más allá de sus decisiones y sus derechos y que venga determinado por el poder político".
Por otro lado, Antonio María Rouco consideró que "va a ser muy difícil" que la Iglesia católica "guarde su identidad" en la asignatura de Religión si es el Gobierno quien nombra a sus profesores y no las diócesis, como hasta ahora.
Finalmente, el arzobispo de Madrid comentó que le llama la atención que un Estado neutral, como España, marque un programa de contenidos para la nueva asignatura Educación para la Ciudadanía y dijo que la objeción de conciencia de los padres para que sus hijos no reciban esta materia "puede estar justificada".
Si (
No(
