El incombustible Delso

El consejo de administración de la inmobiliaria aceptó la renuncia de Delso como consejero dominical Global Cartera de Valores, lo que conlleva también su renuncia como miembro de la Comisión Ejecutiva y de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones. Sin embargo, el presidente del grupo Isolux Corsán, ha sido nombrado por cooptación como consejero.

El baile de puestos tiene como objetivo conservar el capital intelectual de un hombre que llegó al sector en 1994 y que logró no sólo recuperar la ingeniería Isolux, sino convertirla en una de las principales empresas de concesiones, sólo por detrás de las grandes corporaciones.

La carrera de Delso comenzó en el sector financiero, en donde adquirió los conocimientos necesarios para rescatar Isolux, que contaba con un importante endeudamiento. Tras dar la vuelta a la situación, Isolux compró Corsán y se lanzó a por Europistas, en competencia directa con Sacyr. Delso demostró picardía y obligó a Luis del Rivero a 'pasarse de vueltas' en la operación, lanzando por la empresa de autopistas una oferta que algunos calificaron de temeraria.

Aparte de su faceta en el sector de la construcción, Luis Delso entró con un 6% en la constitución de Global Cartera, la sociedad instrumental de Global Consulting, en la que participan Aurelio Álvarez, Domingo Díaz de Mera, la familia Sanahuja y algunas cajas de ahorro.

Global Cartera heredó las participaciones de Díaz de Mera en Colonial y decidió incrementar su posición en un 2% más, que a la postre ha sido la causa de su concurso de acreedores, al no poder pagar el precio convenido. Delso fue uno de los que promovieron el concurso para no abonar un precio que la caída de la promotora había dejado desfasado. La suspensión de pagos ha sido traumática, como todas la medidas de este calibre, pero se ha demostrado que no tanto como para que Delso perdiese su sillón en Colonial.